El periodista expresó que, para el presidente de la República, el necesario deslinde de Vladimir Cerrón no debe significar que nada cambie en el país.
El periodista César Hildebrandt opinó sobre la necesidad de que el presidente de la República, Pedro Castillo, cumpla las promesas de cambio hechas durante la campaña a los ciudadanos más desfavorecidos del país, pero sin alinearse a la agenda ni a las condiciones del secretario general de Perú Libre, Vladimir Cerrón
En primer lugar, en su columna presentada en el semanario Hildebrandt en sus trece, enfatizó que la población no votó, en su mayoría, “por Perú Libre”, sino contra la posibilidad de que Keiko Fujimori tome la presidencia del país.
“La gente votó por un profesor de provincias que se enfrentaba a alias La Chica, la señora que la derecha apoyó con descaro y de modo abrumador a ver si esta vez tenía suerte (…) Que el señor (Guido) Bellido pregunte a la gente que votó por Castillo si es cierto que, en la cabina electoral, pensó en Cerrón y se emocionó”. escribió.
En esa línea, el periodista recalcó que el electorado no eligió a Castillo por estar a favor de la visión “marxista-leninista” que el exgobernador de Junín tendría para el rumbo del país.
“El problema es que las metas comunistas de Perú Libre y del señor Cerrón solo pueden cumplirse después de una revolución popular triunfante”, señala Hildebrandt, quien niega que ese escenario se haya dado, ya que en los últimos comicios “el señor Castillo le ha ganado la batalla electoral a la señora que ya no podrá volver a postular otra vez. Nada menos y nada más”.
Los cambios prometidos
Para Hildebrandt, el presidente Castillo debe buscar los cambios que prometió a los votantes, pero bajo el consenso planteado al Congreso en su discurso de toma de mando.
“Aquí lo que está en discusión es cómo se hará el cambio constitucional que el señor Castillo prometió a sus votantes. Y el señor ya anunció que se someterá al Congreso para lograr esa meta. Lo dijo claramente en el discurso del 28 de julio”, expresó
Sin embargo, el periodista enfatiza que “Nada de lo dicho significa que el nuevo gobierno esté impedido de plantear cambios severos en varios campos: el régimen tributario, el papel del Estado, la reivindicación de los postergados, la lucha contra la desigualdad”.
El rol de la derecha ante las reformas
Asimismo, sobre las agrupaciones políticas de oposición y su postura frente a Castillo, Hildebrant sostuvo que “la derecha no puede confundir las válidas críticas que se le hacen a Castillo con la exigencia inaceptable de que nada debe cambiar”.
“¡Claro que hay muchas cosas que cambiar! Una cosa es que Castillo sume errores precoces y se dispare a los pies con algunos de sus nombramientos y otra muy distinta es pedirle que se olvide de los millones de preteridos que le dieron su confianza (…) El señor Castillo tiene que gobernar un país complicado en un momento especialmente delicado. Su deber es durar. No debe ser peón de Cerrón ni Cosito de la prensa concentrada”, expresó.