Tras dos décadas de luchas contra las fuerzas de la República, en 1949, Mao proclamó el triunfo de la Revolución y la fundación de la República Popular de China.
Este 1 de octubre se cumple el 71 aniversario de la Fundación de la República Popular China por el el dirigente chino Mao Tse Tung, máximo líder del Partido Comunista de China (PCCh).
Mao Tse Tung nació el 25 de diciembre de 1893 y dirigió al gigante asiático hasta su muerte, el 9 de septiembre de 1976, cuando tenía 82 años.
El considerado timonel de la Revolución China, nació en la región de Xiangtang, en la provincia de Hunan, y sirvió en el ejército provincial de Hunan durante la Revolución de Xinhai en 1911, que derrocó a la dinastía Qing, hecho que dio paso a la nueva República de China.
Legado para la historia
En 1921, Mao Tse Tung fundó el Partido Comunista, que luchó en la guerra de la revolución agraria (1927-1937) y enfrentó la invasión japonesa (1931-1945).
Además, obtuvo la victoria en la Guerra Civil contra las fuerzas de la República de China, en 1949, año en el que se proclamó la República Popular.
Uno de sus logros fue el adaptar el marxismo-leninismo a las características de la sociedad china, sus usos y costumbres.
El marxismo-leninismo planteaba que los trabajadores urbanos deberían encabezar la lucha de clases, sin embargo, Mao le dio a la clase campesina el papel central como motor de la revolución.
En 1927, Mao Tse Tung se alzó en armas, formando una agrupación guerrillera, que fue el germen de lo que ahora es el Ejército Popular de Liberación.
En el período 1934-1935 Mao encabezó la denominada “Gran Marcha”, que llevó a los revolucionarios desde el centro sur de China hasta el norte del gigante asiático, salvándolos del exterminio, maniobra que lo hizo ser el líder indiscutible de la revolución.
Luego de dos décadas de luchas contra las fuerzas de la República, el 1 de octubre de 1949, Mao proclamó el triunfo de la Revolución y la fundación de la República Popular de China, de la que fue su primer presidente.
En su Gobierno, Mao emprendió varias campañas de reafirmación ideológica, tales como las denominadas el Gran Salto Adelante y la Revolución Cultural.