Asesor fujimorista es investigado junto con lideresa Keiko Fujimori porque ambos se beneficiaron económica y políticamente de Joaquín Ramírez a través de sus actividades cuando fue congresista y dirigente nacional de Fuerza Popular.
Mientras que los líderes y congresistas de Fuerza Popular insisten en que la Fiscalía de Lavado de Activos ha emprendido una “persecución política” contra el fujimorismo, uno de los más cercanos colaboradores de Keiko Fujimori, Pier Figari aceptó que Joaquín Ramírez le hizo 96 transferencias como pagó por “asesorías” a sus empresas por un total de US$ 181.500, entre 2013 y 2017.
Según la Fiscalía, Figari se compró un lujoso inmueble en Chacarilla del Estanque y 4 vehículos Mercedes-Benz con dichos pagos. Una de las empresas de Ramírez, Lima Ingeniería y Construcción, le hizo 12 transferencias a Pier Figari por US$ 54.000 entre 2014 y 2015. La misma empresa que le cedió a Fuerza Popular la residencia de Chacarilla del Estanque, en Surco. Y que usó Keiko Fujimori como casa de campaña presidencial en el 2016.
También, en el mismo periodo en que Joaquín Ramírez contrata a Pier Figari para que lo “asesore”, su socio y testaferro, Edmond Jordán Montes, compra el terreno que Keiko Fujimori tenía separado en Cieneguilla, en 2015, según el informe de La República.
Pier Figari no pudo demostrar a la Fiscalía que los US$ 181.500 que las 4 empresas de Ramírez le pagaron del 2010 a 2016, eran por sus servicios de “consultoría” y asesoría jurídica como abogado, tal como declaró previamente. Dijo que “se hacían absolviendo diversas consultas vía telefónica o vía electrónica”.
Fuerza Popular omite información cuando defiende a Keiko Fujimori
Cuando el fujimorismo afirma que hay una persecución política contra el partido Fuerza Popular, tratando de desvincularse de Joaquín Ramírez omite información básica sobre la tesis fiscal. Si bien al inicio decían que “son varios años que Joaquín Ramírez salió de Fuerza Popular”, no decían que renunció el 2016.
Tampoco dicen que en la investigación que realiza la fiscalía está incluida Keiko Fujimori y Pier Figari. Ambos, la lideresa de Fuerza Popular y su asesor, se beneficiaron económica y políticamente de Joaquín Ramírez a través de sus actividades cuando este fue congresista y dirigente nacional de Fuerza Popular, entre 2011 y 2016.
Cuando Figari Mendoza era dirigente de Fuerza Popular, las empresas Lima Ingeniería y Construcción, Capricornio Import, Integral Technologies y Ofisoft.com, le hicieron 96 transferencias por un total de US$181.500, entre 2013 y 2017. Y, pese a que la procuradora de Lavado de Activos, Julia Príncipe Trujillo, denunció a Joaquín Ramírez por presuntamente haber usado una red de empresas para el supuesto “blanqueo”, sus compañías investigadas seguían pagando las “asesorías” a Pier Figari hasta el 2017, un año después que Joaquín Ramírez renunció a Fuerza Popular. Esto según el reporte de operaciones sospechosas de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
Las conexiones con la lideresa del fujimorismo
Según la Fiscalía, Joaquín Ramírez habría diseñado una operación de triangulación para financiar en parte la campaña de Keiko Fujimori. Cuando era rector y gerente de la Universidad Alas Peruanas (UAP), Fidel Ramírez Prado, tío de Joaquín Ramírez, simuló contratos con las empresas de su sobrino. Luego estas pagaban las “asesorías” a Pier Figari, una parte para su beneficio y otra para financiar la campaña de Keiko Fujimori.
“Estas operaciones sospechosas (las transferencias de las empresas de Joaquín Ramírez a Figari), se realizaron antes de las elecciones presidenciales de 2016. (Esto) permite inferir, lógicamente, que se trataba de dirigir el dinero maculado obtenido del delito de fraude hacia el partido político Fuerza Popular”, refiere la Fiscalía de Lavado de Activos y da asidero a la existencia de una triangulación.
Como se sabe, Pier Figari afronta un pedido de 30 años y 10 meses de prisión por lavado de activos, crimen organizado y obstrucción a la justicia, junto con Keiko Fujimori y otros dirigentes fujimoristas, por el caso Cócteles. Esto, porque la Fiscalía descubrió que, por orden de Keiko Fujimori, Pier Figari retiró clandestinamente y en 14 oportunidades, US$ 745.000 de la empresa Sudamérica de Fibras.
Eran los aportes ilegales del empresario Juan Rassmuss Echecopar y de su sobrino Enrique Gubbins Bovet a la campaña de Keiko Fujimori. Figari llevó el dinero en efectivo entre el 13 de agosto de 2013 y el 10 de noviembre de 2015, cuando Ramírez le pagaba sus “asesorías”.
Fuente: El Búho