El especialista en relaciones internacionales, Farid Kahhat, analizó el panorama político en América Latina en RPP y afirmó que la extrema derecha en la región no sabe aceptar derrotas electorales.
El especialista en relaciones internacionales, Farid Kahhat, dijo este lunes que actualmente la izquierda en América Latina “está ganando elecciones [presidenciales] en condiciones muy diferentes” a las que hubo a principios del siglo XXI.
En una entrevista con el programa Todo se sabe de RPP TV, el profesor de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) explicó que hace dos décadas las gestiones gubernamentales de líderes políticos, como Néstor Kirchner, Rafel Correa o Luiz Inácio Lula da Silva, coincidieron con el ciclo de aumentos en los precios de las materias primas —con lo cual pudieron impulsar, entre otras cosas, programas sociales exitosos—, algo que, en el actual panorama político y económico, no ocurre.
“Ahora hay una derecha radical, como [Jair] Bolsonaro y o la de Estados Unidos, que no acepta la derrota electoral y hace todo lo humanamente posible para remover del cargo a presidentes de izquierdas. Dicho sea de paso, no tengo en mente a [Pedro] Castillo en esa lista. Yo no creo que este sea un gobierno de izquierda”, señaló Farid Kahhat.
“Confabulación” contra Lula da Silva
Para el autor de ‘El eterno retorno. La derecha radical en el mundo contemporáneo’, “hubo una confabulación política” en contra de Lula da Silva, quien en vísperas se impuso sobre el ultraderechista Bolsonaro al obtener el 50,9% de los votos contra el 49,1% de su rival en la segunda vuelta de la elección presidencial de Brasil.
“Ahora no queda la más mínima duda de que el juez [Sergio] Moro conspiró contra Lula. Sabemos por mensajes de WhatsApp que, en lugar de esperar la denuncia del fiscal para procesar la igualdad de condiciones con la argumentación de la defensa, coordinaba con el fiscal cómo presentar el caso contra Lula. Sabemos que manda a Lula a prisión y luego termina de ministro del candidato al que le quitó al principal rival del camino. En los debates de segunda vuelta, él era uno de los que asesoraban en el intermedio a Bolsonaro”, detalló.
Lula da Silva fue condenado en 2017 a nueve años y medio de prisión por supuestamente la obtención de un apartamento ofrecido por la constructora OAS a cambio de su influencia para obtener contratos en Petrobras. Estuvo 19 meses en prisión y en 2019 recuperó su libertad. En 2021 un juez de la Corte Suprema de Brasil anuló todas las sentencias dictadas contra el expresidente.