Aunque para los más jóvenes y adolescentes, Facebook es una red social “para personas mayores”, su influencia en todas las capas de la sociedad en el mundo es innegable. Basta con analizar esta cifra: 1.930 millones de personas, al menos una vez al día, se conectan a ella. Por eso, las revelaciones de los Papeles de Facebook (o Facebook Papers) que se están dando a conocer desde el lunes muestran lo poco que ha hecho la empresa de Mark Zuckerberg para combatir la desinformación al mismo tiempo que sus ganancias se siguen disparando.
Los documentos están siendo publicados por un consorcio de 17 medios en el mundo, que incluyen la cadena CNN y los diarios “The New York Times” y “Washington Post”, y se basan en las filtraciones de Frances Haugen, una exempleada de Facebook que semanas atrás se presentó ante el Congreso estadounidense para alertar sobre las prácticas de la compañía.
Sus denuncias abarcan una cantidad de frentes, desde los esfuerzos de Facebook por ganar una mayor audiencia hasta el daño que sus plataformas pueden hacer a los niños y adolescentes, y su presunto papel en la promoción de la violencia política.
Como señala la agencia AP -que también está revelando los detalles de los Facebook Papers- los documentos reflejan cómo la millonaria empresa demoró, o directamente ignoró, los esfuerzos para resolver los perjuicios que la empresa causa o magnifica.
Normalmente, Facebook evalúa las publicaciones según el interés que generan, la cantidad de “me gusta”, “me enfada” o “me entristece”, comentarios y de veces que son compartidas. Esa forma de evaluar funciona con publicaciones inocuas, como recetas de cocina y fotos de perros. Pero los documentos del propio Facebook señalan que cuando se trata de temas que generan divisiones -como la política, la religión o las vacunas—, esa forma de catalogar publicaciones alimenta la polarización, el extremismo y la desinformación.
Los esfuerzos internos para mitigar esos problemas a menudo son abandonados cuando las soluciones conspiran contra el crecimiento de la empresa.
Zuckerberg ya ha dicho que se quiere pintar una imagen falsa de su compañía. “La realidad es que tenemos una cultura abierta que fomenta la discusión y la investigación sobre nuestro trabajo para que podamos avanzar en muchos temas complejos que no son específicos de nosotros”, expresó a CNN.
“Estamos viendo un esfuerzo coordinado para utilizar selectivamente documentos filtrados para pintar una imagen falsa de nuestra empresa”, agregó el magnate de 37 años.
“Todos estos artículos parten de una premisa falsa. Sí, somos un negocio y queremos ganar dinero, pero la idea de que lo hacemos a expensas de la seguridad o el bienestar de la gente revela una falta de conocimiento acerca de cuáles son nuestros intereses comerciales”, manifestó la empresa de California en un comunicado.
Contra las vacunas
Los documentos están revelando diversos casos en que Facebook no hizo lo suficiente para evitar diseminar desinformación. Uno de los casos más relevantes es de las vacunas contra el COVID-19.
Según los informes, los empleados de Facebook ofrecieron desde marzo periódicamente soluciones para contrarrestar la desinformación sobre las vacunas, pero no fueron tomados en cuenta a tiempo. La empresa, sin embargo, ignoró las recomendaciones del estudio y recién en abril hizo algunos cambios.
La barrera del idioma
Los papeles filtrados por Haugen también muestran que Facebook no ha logrado generar soluciones basadas en la inteligencia artificial, capaces de detectar el contenido nocivo en distintos lenguajes. Como resultado de esto, las informaciones que promueven la intolerancia o incluso el terrorismo proliferan en algunas de las regiones más volátiles del mundo, como el Medio Oriente o el sudeste asiático. En otras, el desconocimiento del lenguaje por parte de la empresa hace que se excluyan expresiones cotidianas.
En el Medio Oriente, por ejemplo, Facebook apela a filtros de inteligencia artificial que cometen muchos errores, según un documento. Personal poco capacitado, que a veces usa el traductor de Google, no analiza con rigor el contenido escrito en dialectos regionales.
La amenaza de Apple
Hace dos años, Apple amenazó con retirar las aplicaciones de Facebook e Instagram porque esos servicios estaban siendo usados para la contratación ilegal de personal doméstico en el Medio Oriente.
Luego de prometer públicamente que combatiría esas actividades, la empresa reconoció en documentos internos que no estaba haciendo lo suficiente para reprimir “actividades abusivas confirmadas”, denunciadas, en su mayoría, por empleadas filipinas a través de sus redes. Apple finalmente no cumplió su amenaza.
En números: Facebook, una empresa millonaria
Ingresos enero-setiembre 2021: US$ 84.258 millones
Ganancias netas enero-setiembre 2021: US$ 29.085 millones (62% más que enero-setiembre 2020)