Constantes paralizaciones y huelgas desde enero no permiten que la industria de los viajes en la región recupere sus índices prepandemia, pese a que es el destino más importante del Perú a nivel internacional. Son alrededor de 200 mil los trabajadores del sector afectados.
La industria del turismo es muy sensible a los conflictos sociales. Las cancelaciones de paquetes no se acotan a los días de paro, sino que se extienden por semanas y meses.
El Gobierno había exhortado a representantes de las organizaciones a “levantar sus medidas de lucha para mantener la paz social” dicho perdido fue ignorado.
“Después de haber evaluado el acta de la reunión sostenida con el premier, se ratificó las 48 horas del paro, continuaremos con los piquetes desde primeras horas para terminar con una movilización multitudinaria. Existen dudas sobre el cumplimiento de la instalación de las mesas de trabajo y la llegada del presidente Pedro Castillo. Todas las bases de las provincias de Cusco han confirmado la continuidad del paro”, confirmó, Germán Santoyo representante de la Federación Departamental de Trabajadores de Cusco (FDTC).
La plataforma de lucha se centra en el rechazo al alza de los alimentos, combustibles y fertilizantes. Los agricultores también reclaman por el incumplimiento de la denominada segunda reforma agraria que anunció el gobierno de Pedro Castillo, entre otras demandas también se encuentra la revisión del contrato de gas de Camisea, pago de sobreganancias de las empresas mineras, generación de empleo, reforma tributaria, etc.
Por su parte, RPP TV detalló que 21 bases de las organizaciones sindicales del Cusco y de la Federación Departamental de Trabajadores fueron las que decidieron continuar con el paro de 48 horas.
En el reporte periodístico se señaló que Josué Marocho, presidente de la Asamblea Regional de Jóvenes del Cusco, afirmó que existe desconfianza en los ciudadanos debido a que, según dijo, el Gobierno no ha cumplido con documentos y actas firmadas anteriormente.
Advirtió que si en caso el presidente Pedro Castillo no llega al Cusco o se suspende la realización del Consejo de Ministros descentralizado, la protesta se radicalizaría.
