De acuerdo al nuevo protocolo para la aplicación de la dosis de refuerzo bivalente para el año 2023, los adultos mayores de 60 años deben aplicarse la dosis de refuerzo si ya pasaron cuatro meses de la dosis anterior.
La vacunación contra la COVID-19 sigue en el Perú y, ante el hallazgo de una nueva variante del coronavirus, el Ministerio de Salud hizo un llamado a la población a completar el esquema de refuerzo con la bivalente para evitar que este virus vuelva a causar daño y muerte en nuestro país.
Por ello, de acuerdo al nuevo ‘Protocolo para la aplicación de las dosis de refuerzo bivalente para el año 2023′, los adultos mayores de 60 años deben recibir un segundo refuerzo de la vacuna bivalente, si ya pasaron cuatro meses desde la dosis anterior. Incluso, las personas con alguna comorbilidad (diabetes, cardiopatías, personas con VIH, receptores de trasplantes, etc), también deben aplicarse la inmunización en un intervalo de dos meses.
El protocolo del Minsa menciona que “el objetivo es migrar de manera progresiva al uso exclusivo de la vacuna bivalente contra la COVID-19, tanto para el esquema primario y de refuerzo en población de seis meses edad a más”.
Protocolo para niños y niñas de 6 meses a 5 años
El documento del Minsa también señala que la vacunación en el menor de 5 años desde los 6 meses de edad está sujeta a las disposiciones de la Autoridad Nacional de Salud y para ello se deben cumplir los siguientes lineamientos:
– En caso de haber recibido 2 dosis de Monovalente, puede recibir 1 dosis de bivalente.
– En caso de haber recibido una dosis de monovalente, colocar una dosis de bivalente. No requiere de otra dosis de refuerzo.
– Para el uso en no vacunados con SPIKEVAX Bivalente, esta será solo con dos dosis intervalo de 28 días.
– Para el uso en no vacunados con COMIRNATY Bivalente, esta será de 3 dosis (intervalo entre 1ra y 2da dosis es de 21 días y el refuerzo, y 2 meses después de la última dosis).
– La dosis será adecuada al rango de edad.
Protocolo del Minsa para la vacunación de niños entre 6 meses y 5 añosPara el caso de la vacunación en niños de 5 a 11 años se aplica la primera dosis se realiza con la vacuna ARN mensajero (ARNm), luego de 21 días se aplica la segunda dosis de la ARNm y pasado dos meses se pone la dosis de refuerzo.
Para los menores de 12 a 17 años, se aplica la primera dosis de la vacuna ARN mensajero (ARNm) y, pasados los 21 días, se pone la segunda dosis. Pasados los dos meses se pone la dosis de refuerzo con la vacuna Bivalente (SPIKEVAX).
En caso de ser paciente oncológico sin dosis previas, iniciar la primera dosis con la vacuna Bivalente, 2da dosis después de la 4ta semana y 3ra dosis a cuatro semanas después de la 2da.
Si se trata de un paciente trasplantado sin dosis previas, se pone la primera dosis con vacuna Bivalente, la segunda dosis después de cuatro semanas y la tercera, cuatro semanas después de la 2da.
Cómo se aplica la vacuna bivalente en Perú, según protocolo del MinsaRequisitos para vacunarse con la Bivalente
Para recibir la aplicación de la dosis de la vacuna COVID-19 y refuerzo bivalente, la persona debe presentar el carné de vacunación, físico o virtual, o el certificado de vacunación digital con el registro de las dos dosis aplicadas.
El personal de salud verificará la autenticidad del certificado de vacunación digital se verifica através del código QR.
La vacunación COVID-19 y de refuerzo es gratuita y no se llama a ningún usuario para agendarle cita previa ni se pide datos personales a través de ninguna llamada telefónica.
FOTO DE ARCHIVO. Una sanitaria prepara una dosis de la vacuna “Cominarty” Pfizer-Bivalente contra la enfermedad por coronavirus (COVID-19) en un centro de vacunación en Niza, en el inicio de una nueva oleada del brote de COVID-19 en Francia. 7 de diciembre de 2022. REUTERS/Eric Gaillard¿Qué es la vacuna bivalente?
La vacuna bivalente, que contiene la cepa original del SARS-CoV-2 y los linajes BA.4 y BA.5 de la variante ómicron, es más efectiva y segura para proteger contra las nuevas variantes del covid-19.
Esta inmunización también ayuda a reducir la probabilidades de hospitalización y muerte de los adultos mayores y personas con comorbilidades.
