La cita permitirá optimizar los esfuerzos mancomunados en procura de mejorar la integridad y la soberanía sobre el patrimonio cultural de las naciones. Foto: ANDINA/Difusión
Expertos nacionales y representantes de instituciones vinculadas a la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales a nivel internacional analizarán hasta mañana las nuevas rutas y modalidades del delito en la ciudad del Cusco, con el objetivo de intercambiar experiencias sobre el régimen actual y las prácticas internacionales que combaten el flagelo.
El Ministerio de Cultura, en coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores y la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) Cusco, y la cooperación de la Unesco Perú desarrollan desde hoy el “II foro Cusco: hacia el fortalecimiento de la cooperación internacional para la protección y recuperación del patrimonio cultural, en el marco de la Convención de 1970”.
La primera jornada de la cita multilateral congregará a representantes de la Unesco, así como de funcionarios gubernamentales de Colombia, Chile, Argentina, Guatemala, Egipto y Perú.
En la reunión se plantea visibilizar los logros de la Convención de 1970, con especial atención a la prevención, a los esfuerzos que despliegan los países para implementar los principios y directrices, así como los retos.
La segunda jornada contará con la presencia de funcionarios de entidades vinculadas al control y prevención del tráfico ilícito de bienes del patrimonio cultural, como el Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI), Guardia Civil de España, Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) y el Comando de Carabinieri para la Protección del Patrimonio Cultural Italiano.
En esta jornada se dialogará en torno a las nuevas rutas y modalidades de tráfico ilícito de bienes culturales. También se intercambiarán experiencias en materia de prevención, protección, devolución y restitución de bienes culturales; y se tratará sobre los principios de diligencia debida en el mercado del arte.
El Ministerio de Cultura considera esta cita de trascendental importancia para la comunidad internacional, porque optimizará los esfuerzos mancomunados en procura de mejorar la integridad y la soberanía sobre el patrimonio cultural de las naciones.