En la zona central del Perú, más precisamente en Huancayo, se ejecuta el “huaylas”, danza típica peruana con melodías ejecutadas por orquestas compuestas de saxos, clarinetes, violines y arpas.
Su origen es la trilla nocturna de los granos tras la cosecha. De allí, proviene el fuerte zapateo característico y la danza, representa el vistoso galanteo del macho a la mujer del chihuaco o zorzal, ave que abunda en Junín.
Origen del huaylas
El origen exacto de esta danza se desconoce, la única referencia que se tiene es que pertenece al valle del Mantaro, donde se ejecuta este estilo de huaino, muy típico con sus paradas y alegría. Ejecutado normalmente por bandas y orquestas de metales, tiene una identidad propia que ha ido a más con el pasar de los años, dando a luz maestros en el género, como el Picaflor de los Andes o Zenobio Dagha.
La orquesta normalmente está compuesta de saxos de diversos tamaños, clarinetes, violines y arpa. La peculiaridad con la que compiten estas orquestas hace que interpreten cada una las piezas con su propio sello musical, de tal forma que acaben siempre todos los temas con un final propio y distintivo del resto. Igualmente dada la fuerza de la danza que acompaña la música hay predilección por denominar las piezas musicales con la frase: “Rompe…”.
Originalmente simbolizaba la plantación de la papa y se ejecutaba con flautas y tambor. El zapateo característico puede ser una reminiscencia de la época.
Generalidades del huaylas
Es una danza típica donde los bailarines imitan los movimientos que realizan en el campo durante la siembra de la papa, se ejecuta con fuerza, habilidad y destreza, permitiendo entre los varones una competencia sana.
Al principio, este baile fue solo de hombres, quienes al compás de los cánticos de sus mujeres, tratan de llevar el ritmo con movimientos de carácter agrícola que dieron origen a esta expresión cultural del Valle del Mantaro.
Los bailarines ejecutan un contrapunto de habilidad, con vigor y energía, mostrando creatividad y tratando de ser el mejor del grupo.
Entre los pasos que se ejecutan tenemos:
El ishta tac: Acción de clavar la estaca en el suelo
El cullpa wipyay: Acción de golpear los terrones
El acshru ashrmy: primer cultivo
El acshru acshru tahatay: segundo cultivo
El tacanacuy o trompeadera: contrapunto entre los varones, competencia de habilidad, fuerza y destreza que hace posible medir sus capacidades físicas
Tipos de huaylas
Huaylas agrícola:
Conocido como el huaylas antiguo, este tipo consiste en un cortejo a la pareja con galanteos que imita al chihuaco (zorzal), en un ambiente de campo, la coreografía contiene movimientos de siempre, cultivos y cosecha de la papa y otras faenas agrícolas. El vestuario es de la chacra y con los pies descubiertos.
Huaylas de salón:
Es el huaylas moderno. Las damas llevan ropa bordada con varias polleras. El chaleco del varón es también bordado y los pantalones acampanados con una abertura en el botapié con una tela blanca que recuerda la ropa interior del huanca antiguo.
Se baila en una pista de madera con zapatos de tacón. Las orquestas que acompañan a estos danzantes tienen un duelo aparte, con el propósito de llegar a ser los más populares.
El huaylas es una danza preinca y el nombre fue adoptado en la sierra central en 1533. Fue cuando el conquistador Francisco Pizarro y su esposa Inés Huaylas Yupanqui (Princesa Quispesisa), viajaron de Cajamarca al Cusco.
En ese viaje, decidieron visitar a la familia maaterna de la princesa que vivía en Huaylas (Áncash) y luego prosiguieron su trayecto hacia territorio cusqueño, uniéndose al sequito un grupo de músicos y eximios bailarines procedentes del Callejón de Huaylas (Inés Huaylas era hija del inca Huayna Capac y de Contarhuacho, una hija del cacique de Huaylas). Cuando llegaron a Jauja, la princesa no pudo continuar con el viaje al encontrarse en un avanzado estado de gestación de su primera hija, por lo que Pizarro la dejó en compañia de sus músicos por el tiempo que fuera necesario para dar a luz a Francisca Pizarro, su heredera.
Los huancas se quedaron prendados de la agilidad y belleza del huayno acrobático practicado por lo bailarines del Callejón de Huaylas, motivo por el que decidieron adoptarlo y conservarlo como suyo hasta nuestros días.