Lo que en principio era una broma para entretener al público en el cuarto partido de las finales de la NBA entre Miami Heat y Denver Nuggets acabó en urgencias, y todo por el ímpetu del luchador de UFC Conor McGregor.
Ocurrió en el descanso del encuentro entre los finalistas, en el Kaseya Center de Miami. Como parte del show, el legendario luchador irlandés tenía que enfrentarse a Burnie, la mascota del equipo de Florida. Pero al parecer, el dublinés no midió bien su fuerza.
McGregor tumbó de un puñetazo a la mascota, que lucía guantes de boxeo, y una vez en el suelo, el luchador de UFC le dio otro golpe, si cabe más contundente.
Burnie fue llevado a rastras por el parqué del Kaseya Center, en lo que todo el mundo daba por hecho que era parte del show pergeñado por la NBA para entretener al público.
Pero en realidad, el hombre que se enfundaba el traje de Burnie tuvo que ser llevado a urgencias para ser tratado de los dos golpes que se llevó de los poderosos puños de McGregor.
Por fortuna, según las informaciones llegadas desde Miami, el hombre recibió tratamiento con analgésicos y dado de alta poco después tras haberse enfrentado a una de las mayores leyendas de la UFC.