Victoria del Real Madrid en el Santiago Bernabéu ante un Celta que no solo no consiguió poner en aprietos a los blancos, sino que se metió dos goles en propia que impulsaron el ímpetu de los locales, que acabaron goleando 4-0.
Sin Bellingham, Ancelotti apostó por Brahim Díaz en la posición de ’10’, con mucha movilidad por delante gracias a la presencia de los brasileños Vinícius y Rodrygo. También hubo rotaciones, con Lucas Vázquez y Modric vistiéndose de corto, y dando la talla.
Los primeros veinte minutos fueron del Real Madrid, aunque el Celta de un Rafa Benítez que volvía al Bernabéu, fue valiente en sus ataques. En el minuto 21, Luka Modric puso un fantástico centro que remató Rüdiger, y tras varios rebotes, Vinícius adelantó a los blancos.
La primera parte acabó con la mejor oportunidad del Celta: Luca de la Torre remató arriba el centro de un desaparecido Iago Aspas. El segundo tiempo arrancó con un Madrid más lento, principalmente por la reducida importancia de un Luka Modric sensacional durante los primeros cuarenta y cinco minutos.
La polémica del partido llegó a los diez minutos de echar a rodar el balón en el segundo tiempo. Vinícius se enganchó con Mingueza tras una falta del catalán, empujando el brasileño a su rival y siendo amonestado, de nuevo, en una acción en la que el extremo del Madrid perdió los papeles en vez de aprovechar la situación a su favor.
El segundo tanto blanco llegó de nuevo a balón parado. La conexión Luka Modric – Antonio Rüdiger volvió a aparecer, con un poderoso cabezazo del alemán que rebotó en el larguero y en Vicente Guaita para acabar tras la línea de gol.
Tras el segundo cambio, el Celta se rompió, y Ancelotti aprovechó los últimos minutos para dar descanso a Brahim, Modric, Rodrygo, Camavinga y Vinícius, sin antes poner este último un magistral centro que, tras una mala salida de Guaita, el Celta volvió a meterse en propia.
Arda Güler, que tuvo minutos al final, se estrenó como goleador en el conjunto blanco, con un tanto en el descuento en el que Kroos, Ceballos y el turco aprovecharon la desconexión del conjunto vigués para anotar el cuarto y definitivo.
El Real Madrid mantiene su ventaja de siete puntos sobre el Girona y ocho sobre el Barça con diez partidos por disputar. El Celta, por su parte, se acerca peligrosamente al abismo del descenso, perdiendo la renta de más de un partido de distancia que hasta hoy conservaba.