Caerá más o menos simpático en determinados sectores por su pasado glorioso en el FC Barcelona, por sus ideas al margen del deporte, por quienes ven en su forma de ser un punto de sobreactuación pero ya tiene en el saco la Champions League con el Manchester City que le reclamaban aquellos que se resistían a reconocerle sus méritos y con ella Pep Guardiola es definitivamente leyenda del fútbol.
Guardiola era uno de los entrenadores más laureados de la historia. Ahora ya es el único que ha sido capaz de ganar el triplete (Liga, Copa y Champions) dos veces, y con equipos diferentes, tras lograrlo por primera vez con el Barça en 2009.
Pep es el tercero que consigue tres Champions, se equipara al inglés Bob Paisley y al frances Zindine Zidane, y solo le supera el italiano Carlo Ancelotti, con cuatro. En total Guardiola lleva 35 títulos obtenidos en 15 años de carrera en la élite de los banquillos.
Guardiola se había resistido a admitirlo hasta verse obligado días antes de la final de Estambul a asegurar que “todo lo que hemos hecho, que ha sido mucho, muy bueno, en muchos años dará sentido si ganamos la Champions y si no la ganamos, no dará sentido”.
1.242 millones de euros después
Ahora tiene ya la ‘Orejona’ con el City, pero aún así sus más contumaces detractores le martillean con aquello de que “con los millones del jeque así cualquiera”. Es cierto que desde Emiratos Árabes sus propietarios han invertido 1.242 millones de euros en fichajes (también han ingresado 572 en traspasos) desde que Guardiola llegó al Etihad Stadium en 2016, pero el dinero en el fútbol no lo es todo.
Y si no que se le pregunten a los dueños qatarís del PSG. Lo compraron en 2011 y su ambicioso proyecto por reinar en Europa sigue encadenando fracasos año a año.
El legado de Cruyff
Guardiola ha tardado siete años en encumbrar al City en la Champions y lo ha logrado gracias al abundante dinero procedente de Abu Dhabi que le ha permitido incorporar a Erling Haaland, un goleador absolutamente diferencial.
Pero los ‘sky blues’ también han hecho definitivamente historia hoy en Estambul gracias al sello personal de Pep, a esa filosofía futbolística, a esa apuesta por el juego de posesión y circulación rápida de balón que aprendió de su ídolo Johan Cruyff en su etapa de jugador del Barça y no ha abandonado ni en los peores momentos.
Ambición, pasión y obsesión por innovar
Todo el mundo sabe cómo juega el City, un estilo inconfundible que no sería sinónimo de éxito sin la ambición y pasión con que Guardiola vive el fútbol y su capacidad de liderazgo para transmitirlas a sus pupilos y mantenerles permanentemente enchufados. Solo así se explica que haya ganado cinco de las últimas seis ediciones de la Premier League, el campeonato más exigente y competitivo del mundo.
A sus 52 años, Pep mantiene la obsesión por introducir permanentemente matices y variantes tácticas para que el City no se previsible para los rivales. Jugar con tres centrales y adelantar a John Stones al doble pivote junto a Rodri ha sido una de las claves de esta temporada. El resultado a tanto trabajo y dedicación es esta Champions para orgullo de Guardiola y el guardiolismo.