El seleccionador francés, Didier Deschamps, distendido desde que comenzó el Mundial de Qatar, en vísperas de jugarse contra Inglaterra el pase a semifinales presumió con satisfacción de haber logrado la serenidad necesaria para su grupo y de confiar plenamente en su estrella Kylian Mbappé.
“Como los otros rivales, Inglaterra hará todo lo posible para frenar a Kylian. Pero tiene mucha calidad para marcar la diferencia. Siempre encuentra las soluciones. Incluso en el último partido, cuando estuvo peor que en los dos primeros, fue decisivo“, dijo.
El atacante, que ya cuenta con cinco goles y tres asistencias, volverá a ser el elemento clave de su equipo, pero Deschamps no quiere hablar de dependencia de su delantero, ni tampoco quitar mérito a lo que viene haciendo.
El seleccionador galo aseguró que Inglaterra “no tiene” puntos débiles, pero sí algunos en los que no es tan fuerte, que tratarán de explotar para alcanzar las semifinales por segundo Mundial consecutivo.
El peligro puede venir de las jugadas a balón parado, donde Deschamps reconoció que su rival “es muy fuerte”, pero donde recordó que Francia también puede crearse ocasiones
Otro punto clave puede venir de la velocidad, que el técnico consideró “la manera de evitar que el adversario tenga tiempo de organizarse” y que Inglaterra tiene bien trabajada.
“La transición de los ingleses es muy buena, más de la mitad de sus goles han llegado en transiciones rápidas, es una de sus cualidades, aunque tienen otras, como la capacidad goleadora o el juego a balón parado. No es por casualidad si han llegado hasta aquí”, señaló.
La calma solo la pierde Deschamps cuando le hablan de su futuro, después de que el presidente de la Federación, Noel Le Graet, le propusiera, a través de la prensa, la renovación de su contrato, que expira al final de esta competición y que, por ahora, el técnico se ha negado a prolongar.
“El presidente ha sido muy amable por decir eso. Pero no creo que no es el momento de hablar de eso, estamos concentrados en este partido”, aseguró.
Deschamps sabe que Francia tendrá que mejorar con respecto a los cuatro partidos anteriores si quiere optar a renovar su título.
“Cuanto más avanzas en una competición, más sube la calidad de los rivales y también la exigencia para afrontarlos. Para algunos, también sube la excitación. Pero los jugadores querían estar aquí, ahora que estamos, hay que mejorar. Sin estrés. Lo importante es disfrutar de unos cuartos y saber que podemos ganarlos”, indicó.