A veces las peleas estelares no dos dejan nocauts o sumisiones pero, a cambio, nos dan todo un espectáculo técnico. Esto es lo que sucedió tanto en la pelea de Cub Swanson con el canadiense Hakeem Dawodu como en la de Rafael Dos Anjos con Vicente Luque en UFC Vegas 78.
El evento estelar, protagonizado por estos dos últimos peleadores brasileños, nos permitió ver una enorme variedad de acciones de clinch en la reja. Dos Anjos, consciente de que en el striking Vicente Luque iba a ser demasiado, trató de llevarse la pelea por estos derroteros pero ahí se encontró una gran sorpresa y es que su oponente había mejorado considerablemente en este terreno.
Parece que Vicente Luque no ha perdido el tiempo mientras ha estado separado de la competición debido a una hemorragia cerebral y que ha dado un salto de nivel en su grappling. Además, su evidente ventaja de tamaño y fuerza le permitía imponerse en muchos de los lances, tanto en defensa como en intento de derribos. Podemos verlo muy bien en este vídeo, que muestra tanto la fuerza como el buen trabajo de presión de Vicente Luque con la cabeza contra la reja, bajando después a los pies para sacar el derribo. Fue todo este trabajo el que le otorgó una merecida decisión.
Por otro lado, Cub Swanson nos dejó una excelente clase de movilidad en el striking, demostrando que, aunque no está en su mejor momento, quien tuvo retuvo. Con esta movilidad, entrando y saliendo, Swanson consiguió conectar los golpes más duros de la pelea.
Swanson, por tanto, brilló más aunque lo cierto es que no fue mejor, como él mismo reconoció al final de la pelea. En realidad, dio la impresión de que Hakeem Dawod hizo un trabajo algo más sólido, conectando algunos jabs de encuentro que hicieron bastante daño a Swanson, hemorragia nasal incluida. En cualquier caso, los jueces se dejaron llevar por el brillo, y quizás por la forma en la que acabó la pelea, con un derribo de Swanson y un minuto de control en el suelo, para dar la decisión unánime al estadounidense.