La libra egipcia ha caído este miércoles más de un 32 % en diferentes bancos del país después de que el Banco Central Egipcio (BCE) anunciara que permitirá que el mercado determine el tipo de cambio y una subida de los tipos de interés oficial en 600 puntos.
El National Bank of Egypt, el Banque Misr y el Commercial International Bank (CIB) muestran en sus páginas webs que el dólar se cambia ahora oficialmente a 46 libras, lo que representa una caída del 32.8 % ya que la moneda local estaba estancada desde hace meses en 30,9 por divisa verde.
Esta apuesta por la ‘flotación’ libre de la divisa se debe a que es uno de los requisitos del Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar la deuda multimillonaria que acumula el país árabe. “La unificación del tipo de cambio es crucial, ya que facilita la eliminación de los atrasos de divisas tras el cierre del diferencial entre el mercado oficial y el paralelo”, ha indicado la entidad.
El país negocia un nuevo préstamo con el FMI, después de que no se pudiera hacer efectivo un acuerdo por 3.000 millones de dólares acordado a finales de 2022 debido al incumplimiento por parte de Egipto de las condiciones para el mismo.
Egipto afronta este año el vencimiento del pago de unos 30.000 millones de su deuda, mientras sus reservas de divisas apenas llegan a cubrir esa cuantía, sin contar con los enormes gastos en que debe incurrir para importar productos de alimentación y de primera necesidad.
Otra de las decisiones anunciadas este miércoles por el Banco Central del país norteafricano ha sido la elevación del tipo de interés oficial en 600 puntos básicos, hasta el 27,75 %.
El Comité de Política Monetaria de la entidad emisora decidió en una reunión extraordinaria “elevar el tipo de depósito a un día del BCE, el tipo de préstamo a un día y el tipo de la operación principal en 600 puntos básicos, hasta el 27,25 %, el 28,25 % y el 27,75 %, respectivamente”, según indicó en un comunicado.
El BCE añadió que este aumento, junto con la libre flotación de la moneda, se adopta como parte de “un conjunto de reformas económicas globales en coordinación con el Gobierno y respaldadas por el firme apoyo de los socios multilaterales y bilaterales”.
Esta depreciación de la libra egipcia es el último paso de un camino que comenzó el 21 de marzo de 2022, después de que el BCE decidiera elevar ese día los tipos de interés en 100 puntos básicos, el primer movimiento de ese indicador en un lustro.
La moneda, que oficialmente es de libre cambio pero cuya cotización está controlada por los bancos Mirs y National Bank, de titularidad estatal y de lejos los mayores del país, pasó de un tipo de cambio frente al dólar de 1/15,85 a 1/18,15.
En octubre de ese año el BCE volvió a elevar en 200 puntos básicos, hasta el 13,25 %, la tasa de interés y anunció que “flexibilizaría” el tipo de cambio de la libra, lo que inmediatamente causó otra abrupta pérdida de valor de la moneda. Ese día, llegó a intercambiase por unas 22 unidades por dólar.