“La primera reforma agraria de 1969 tenía tres etapas: primero, entregar las tierras al productor que se concretó y que devolvió la dignidad al campesino; la segunda etapa era de capacitación que fue frustrada, y una tercera etapa consiste en la tecnificación e industrialización del agro y es ahí a donde estamos convocando a estas cumbres agrarias para que los agricultores brinden sus propuestas”.

Así ha explicado el titular del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), Víctor Maita Frisancho –a grandes rasgos– lo que propone el Gobierno respecto a la denominada segunda reforma agraria.

En los últimos días, el ministro ha enfatizado en su discurso que, entre las acciones primordiales en este objetivo, está una mayor capacitación y asistencia técnica a los productores de la agricultura familiar, así como la industrialización del sector.

“Lo que falta concretar es movilizar, organizar y capacitar al campesino, y esto no se ha hecho y hay que retomarla; también vamos a impulsar la industrialización”, indicó, aunque no ha dado más detalles.

El análisis de Laureano del Castillo, director ejecutivo del Centro Peruano de Estudios Sociales (Cepes), es que, considerando el mensaje del 28 de julio y las declaraciones posteriores del presidente de la República, Pedro Castillo, la reforma iría por el apoyo a la agricultura familiar en cuestiones de irrigación y créditos, que descartarían esa sombra y temor a las expropiaciones.

“Hasta el momento nadie ha hablado de expropiaciones sino de promover las producciones, se ha hablado de potenciar el FAE-Agro, de impulsar las investigaciones y los rendimientos”, señaló el académico quien además anotó que hay puntos que el Gobierno debe también precisar.

“Por ejemplo, en cómo garantizará que el crédito del FAE-Agro llegue más rápido porque ya hemos visto que se ha colocado menos del 12%; sería tranquilizador saber qué propone sobre los proyectos de irrigación y cómo se incentivará la asociación para que al menos los medianos productores también puedan participar de la subasta de terrenos en Majes-Siguas II; o si para impulsar la agricultura familiar se va a necesitar de un proyecto de ley”, indicó Del Castillo.

Asimismo, opinó que un mensaje que tendría que dar el Gobierno a los agroexportadores es que por lo menos en el corto plazo no se va a realizar modificaciones a sus nuevos beneficios tributarios –aprobados en enero de este año–, “para darles estabilidad”.

En su opinión, será indispensable también que Castillo Terrones pueda asumir su compromiso con los gremios agrarios, entre ellos, restituir la franja de precios y darle una atención preferente al agro nacional.

Promulgan ley para la industrialización del agro

El Ejecutivo promulgó la Ley Nº 31339, que “promueve la industrialización del agro”, con el propósito de impulsar la diversificación, la reducción de la dependencia de los precios de materias primas, la mejora de la productividad, el aumento del empleo formal y de calidad, y un crecimiento económico sostenible de largo plazo.

Asimismo, se encargó al Ministerio de Desarrollo Agrario a elaborar el Plan Nacional de Competitividad Agraria.

Reacciones

Víctor Maita Frisancho, titular del Midagri

“Organizar y capacitar al campesino, esto no se ha hecho y hay que retomarla; también vamos a impulsar su industrialización. Los agricultores son los actores de la segunda reforma”.

Laureano del Castillo, director ejecutivo Cepes

“Hasta el momento nadie ha hablado de expropiaciones, sino de promover las producciones, de potenciar el FAE-Agro, las investigaciones y los rendimientos de los cultivos”.