Celulosa Arauco y Constitución concretó la venta de parte de sus plantaciones en Brasil a Klabin S.A., empresa líder en el sector papelero en aquél país.
La operación, informada en primera instancia durante diciembre del año pasado, deja una cifra multimillonaria para la empresa chilena, que superó las proyecciones iniciales.
Mediante un hecho esencial, la compañía informó a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) que este martes traspasó el total de las acciones que tenía directamente en “Arauco Florestal Arapotí S.A. y Arauco Forest Brasil S.A., e indirectamente en Empreendimentos Florestais Santa Cruz Ltda. y Florestal Vale do Corisco S.A., las que son titulares de activos principalmente en el estado de Paraná, Brasil”.
A fines del año pasado, Arauco informó que las plantaciones bajo esta operación constan de “aproximadamente 85 mil hectáreas útiles” entre pinos y eucaliptus. Las plantas de paneles y otros activos forestales en el estado Mato Gosso do Sul seguirían en manos de la empresa
El precio final de venta superó las estimaciones iniciales, quedando en US$ 1.168.000.000. Después de impuestos, la cifra quedó en unos US$ 967 millones, generando así “una utilidad de aproximadamente US$ 174 millones después de impuestos, para ser reconocida en este ejercicio”.
Tales diferencias respecto al valor previsto inicialmente (US$ 1.160.000.000 y ganacia de US$ 130 millones) surgieron debido al “reconocimiento anticipado al cierre del ejercicio 2023 de impuestos diferidos conforme lo establecen las normas contables IFRS”, sostienen en el hecho esencial.
Arauco, perteneciente al holding de Empresas Copec, anunció a inicios de julio que aprobó una inversión por cerca de US$ 100 millones en su Complejo Trupán Cholguán, en la comuna de Yungay, región de Ñuble.
Esto con el objetivo de habilitar una línea donde se fabriquen productos OSB, junto con modernizar y renovar ciertas partes de la instalación e incorporar nuevos procesos y equipos.
La iniciativa levantaría unos 200 puestos de trabajo en promedio, donde se privilegiaría la contratación de mano de obra local.
Todo en un contexto donde el otro gran actor de la industria forestal, CMPC, ha lanzado reiteradas críticas respecto a las complejidades para realizar inversiones dentro del sector, señalando que “es imposible hacer proyectos en Chile”.
