La Reserva Federal se dispone a revelar su última decisión sobre tipos mientras los inversores esperan con impaciencia las declaraciones del presidente del banco central estadounidense, Jerome Powell. Comienza una batalla entre dos destacados inversores activistas, mientras la presión sobre los prestamistas medianos no cede.
Aquí tenemos las cinco cuestiones principales de las que hay que estar pendientes este miércoles, 3 de mayo, en los mercados financieros
La Reserva Federal publicará su última decisión de política monetaria, y todo apunta a que el banco central estadounidense subirá los tipos de interés otros 25 puntos básicos.
Si esto es así, la Fed habrá elevado los costes de financiación desde el 0% hasta un mínimo del 5% en el plazo de un año. La magnitud y el ritmo sin precedentes de estas subidas ponen de manifiesto la desesperación de los responsables de la política monetaria por reducir la escalada de la inflación.
Las consecuencias del ajuste monetario empiezan a notarse. El sistema bancario estadounidense se tambalea mientras que los últimos datos sugieren que el mercado laboral se está enfriando y que la economía en su conjunto se está ralentizando.
Sin embargo, el crecimiento de los precios sigue siendo obstinadamente elevado. Así pues, los inversores estarán ansiosos por saber si la Fed va a hacer ahora una pausa en su campaña de subida de tipos y, en caso afirmativo, de cuánto tiempo.
Los futuros de las acciones estadounidenses apuntan a una apertura al alza este miércoles, aunque se mantienen en general prácticamente sin cambios, mientras los inversores esperan la decisión de la Fed y cualquier comentario en torno a los planes de futuro del banco central.
A las 10:53 horas (CET), el contrato de futuros del Dow sube 39 puntos o un 0,12%, los futuros del S&P 500 se apuntan un alza de 6 puntos o un 0,15%, mientras que los {{8874|futuros del Nasdaq 100}} avanzan 23 puntos o un 0,18%.
Las declaraciones sobre el camino a seguir para los costes de endeudamiento y el estado del sistema financiero serán centro de todas las miradas cuando comparezca el presidente de la Fed, Jerome Powell, tras el anuncio sobre los tipos de interés en el transcurso de esta jornada.
Las acciones del fondo del multimillonario Carl Icahn que cotiza en bolsa perdían casi una quinta parte de su valor en un solo día el martes, tras convertirse en el último objetivo del vendedor en corto Hindenburg Research.
Hindenburg, dirigida por Nathan Anderson, alegó en un informe que Icahn Enterprises LP había inflado el valor de sus activos, añadiendo que el fondo cotiza con una fuerte prima en relación con sus homólogos. Hindenburg afirma que Icahn estaba haciendo subir sus acciones, en efecto, por medio de las ventas de acciones de nueva emisión para pagar a los antiguos inversores un atractivo dividendo en efectivo de alrededor del 16%, el más alto de las empresas estadounidenses de gran capitalización, según datos citados por Reuters. Icahn, por su parte, recibe su dividendo en acciones y no en efectivo, según Hindenburg.
Icahn, un inversor activista cuya carrera en Wall Street le ha llevado a presionar a grandes marcas para que realicen cambios radicales, ha defendido las declaraciones públicas del fondo. También arremetió contra Hindenburg, asegurando que sus acusaciones eran una estratagema interesada para aumentar su propia posición en corto.
Esta disputa pública no es nada nuevo para Hindenburg. A principios de este año, un informe del grupo con sede en Nueva York eliminaba 100.000 millones de dólares en valor de las acciones del grupo indio Adani y, justo el mes pasado, la empresa de pagos Block, Inc. se situó en su punto de mira.
Las acciones de los bancos medianos estadounidenses cayeron con fuerza el martes, en señal de que el rescate de First Republic Bank aún no ha disipado todas las preocupaciones en torno al estado del sector bancario.
El índice más general de prestamistas regionales registró su cierre más débil desde 2020. Entre los mayores retrocesos estuvieron Western Alliance, que cayó un 15%, y PacWest Bancorp, con sede en Los Ángeles, cuyas acciones se desplomaron un 28%. Ambas han perdido más de 5.000 millones de dólares de valor de mercado este año y descienden antes de la apertura del mercado de este miércoles, al tiempo que se establecen comparaciones con entidades similares que han quebrado recientemente, como Silicon Valley Bank y First Republic.
El lunes, JPMorgan (NYSE:JPM) se lanzó en picado para hacerse con la mayor parte de las operaciones de First Republic después de que los reguladores embargaran al prestamista con sede en San Francisco. En ese momento, el jefe de JPMorgan, Jamie Dimon, dijo que “esta parte de la crisis ha terminado”.
Pero los inversores aún no están convencidos del todo y siguen al acecho de otro eslabón débil del sistema financiero.
Hoy se publica una nueva tanda de resultados de empresas estadounidenses, entre los que destaca el proveedor de chips para móviles Qualcomm (NASDAQ:QCOM).
Los inversores esperan que los resultados del grupo con sede en San Diego, que se publicarán tras el cierre del mercado, ofrezcan alguna pista sobre el estado del mercado de smartphones del país.
Las preocupaciones económicas y la inflación persistentemente elevada han afectado al gasto de los consumidores, lo que está provocando un aumento de las existencias de piezas de teléfonos móviles de los clientes de Qualcomm. Como resultado, los analistas temen que disminuya la demanda de semiconductores de Qualcomm.
Otras empresas importantes que publicarán sus resultados este miércoles son la cadena de farmacias CVS y la marca de cosméticos Estee Lauder.