Dicha evolución se debe al aumento de los ingresos corrientes del gobierno general, principalmente de los ingresos tributarios del gobierno nacional.
El déficit fiscal acumulado en los últimos 12 meses disminuyó de 8.9 a 8.7% del PBI entre febrero y marzo de 2021, informó el Banco Central de Reserva (BCR).
Dicha evolución se debe al aumento de los ingresos corrientes del gobierno general, principalmente de los ingresos tributarios del gobierno nacional, en particular por IGV e impuesto a la renta. Sin embargo, esta mejoría fue parcialmente atenuada por los mayores gastos no financieros del gobierno general.
En marzo de 2021, el sector público no financiero registró un déficit de S/ 2,597 millones, monto menor en S/ 726 millones al registrado en marzo de 2020, por los mayores ingresos corrientes del gobierno general en 43.4% (12% respecto a marzo de 2019).
Entre los mayores ingresos corrientes destaca el aumento del IGV e impuesto a la renta, aunque atenuado parcialmente por el aumento de los gastos no financieros del gobierno general en 29.1%. El déficit fiscal del primer trimestre de 2021 fue menor (S/ 1,679 millones) que el del primer trimestre de 2020 (S/ 2,032 millones). En el periodo pre-pandemia, se registraron mayormente superávit fiscales en los primeros trimestres del año como en 2019 (S/ 5,998 millones).
En los ingresos corrientes resalta el aumento de los ingresos tributarios en 45.1% (19.8% respecto a marzo de 2019), como consecuencia de un contexto internacional favorable, la recuperación de la actividad económica, el adelanto en el pago de regularización de empresas mineras, y el efecto de las postergaciones del cronograma de impuestos (postergación en marzo del 2020 y pago en marzo 2021 de lo postergado el mes anterior).
En marzo destacó la mayor recaudación por IGV, la regularización del impuesto a la renta del ejercicio gravable 2020 y pagos a cuenta del impuesto a la renta de personas jurídicas domiciliadas. El aumento de los ingresos no tributarios en 36.5% (-12.8% con respecto a marzo de 2019) se explicó principalmente por los mayores ingresos por regalías mineras, regalías y canon petrolero y gasífero, y contribuciones sociales.
Por otro lado, los mayores gastos no financieros correspondieron al incremento del gasto corriente en 22.1% en los rubros de bienes y servicios (40.4% respecto a marzo de 2019), en materia de personal CAS y suministros médicos para enfrentar el COVID-19, y en obras de mantenimiento vial vecinal a cargo de las municipalidades en el marco de Arranca Perú, así como por la recuperación de los niveles de gasto que se vieron afectados por la cuarentena de marzo de 2020.
Asimismo destacó el aumento en las transferencias a los hogares vulnerables, en el marco de la segunda ola que motivó la prórroga del estado de emergencia sanitaria y nacional.
Por su parte, el gasto en formación bruta de capital aumentó en 127.4% (71.2% con respecto a marzo de 2019), con lo cual se registró un incremento en las tres instancias de gobierno, principalmente en el gobierno nacional y los gobiernos locales. El crecimiento fue prácticamente generalizado según sectores de gobierno nacional, departamentos en el caso de los gobiernos regionales y locales, y grupos de proyectos (Reconstrucción, respuesta frente el COVID-19, Arranca Perú y resto de proyectos).