El dólar subía levemente frente al yen el viernes, pero se mantuvo en gran medida por debajo de los máximos recientes frente a sus principales pares, ya que los inversores esperaban un informe de empleos en Estados Unidos que podría influir en el camino de las tasas de interés.
El dólar subía un 0,20% frente al yen a 142,8, mientras que el euro se mantenía estable en 1,09455 dólares, justo por encima del mínimo de cuatro semanas del día anterior.
La libra se mantenía plana en 1,2710 dólares, justo por encima del mínimo de casi cinco semanas del jueves que tocó brevemente después de que el Banco de Inglaterra redujera el ritmo de las subidas de tasas de interés a 25 puntos básicos..
Esto dejó el índice del dólar en 102,56.
El jueves, el índice subió a 102,84, el nivel más alto desde el 7 de julio, pero perdió fuerza más tarde en el día con el informe mensual de nóminas no agrícolas que se avecinaba.
El informe debe presentarse a las 1230 GMT (0830 EST) y se espera que muestre que el crecimiento del empleo en Estados Unidos se desaceleró aún más en julio, pero aún tuvo suficiente impulso para proteger a la economía de una recesión. Una encuesta de economistas de Reuters predice que las nóminas no agrícolas (NFP, por sus siglas en inglés) aumentaron en 200.000 empleos el mes pasado.
Los precios actuales del mercado reflejan las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos mantenga las tasas de interés en su nivel actual hasta principios del próximo año. Esto significa, dijo Francesco Pesole, estratega de FX de ING (AS:INGA), que aquí hay espacio para que los mercados se desplacen hacia un nuevo aumento de precios antes de fin de año o adelanten el primer recorte de tasas.
El franco suizo, la moneda del G10 que más ha ganado frente al dólar este año, cayó. El dólar subía un 0,4% a 0,8776 francos, alejándose aún más de un mínimo de ocho años y medio de 0,8554 alcanzado a finales de julio.
El yuan chino recortó las ganancias iniciales frente al dólar y parecía dispuesto a registrar una caída en la semana, ya que se desvanecieron las esperanzas de una política de estímulo inminente para ayudar a la economía tambaleante.
