La economía mexicana tiene un buen augurio al haber retomado los bríos en abril, después de una contracción en marzo. Esta mañana, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) de abril que anticipa avance mensual de 0.4% mensual, y de 2.6% en su lectura anual.
En tanto, el INEGI revisó a la baja el estimado de marzo, de un avance de 0.10% a una contracción de 0.14% para llevarla a una lectura anual de 3.2%.
“El IOAE anticipa que el IGAE experimentará una desaceleración a 2.6% anual, conformado por lecturas de 1.7% anual en las actividades secundarias y de 2.8% anual en las terciarias”, destacaron desde Intercam Banco.
Aún con este enfriamiento en la lectura anualizada, Marcos Daniel Arias Novelo, analista económico de Grupo Financiero Monex, reconoció que el dato de abril “es el segundo mejor resultado de los últimos 7 meses y mantiene viva la inercia de dinamismo que sorprendió gratamente durante el primer trimestre”.
El IAOE es un indicador del INEGI basado en modelos econométricos que permite contar con estimaciones econométricas oportunas sobre la evolución del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE).
Los analistas de Grupo Financiero Banorte (BMV:GFNORTEO) proyectaron que el PIB mexicano del primer trimestre habría avanzado alrededor de 1.1% trimestral, utilizando el IGAE de enero y febrero, en conjunto con el estimado de marzo.
“En general, creemos que el resultado fue positivo. Hacia delante, el dato de abril sugiere que la economía siguió creciendo en el segundo trimestre de 2023, aunque a un menor ritmo. A su vez, es consistente con una base de comparación más difícil y mayores vientos en contra, sobre todo en el frente externo”, señalaron.
Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, mencionó que si se asume un crecimiento mensual de 0% en mayo y junio, el IOAE de abril implicaría un crecimiento trimestral del PIB cercano a 0.4% en el segundo trimestre y un crecimiento anual cercano a 2.9%.
“El supuesto de crecimiento de 0% en mayo y junio no es un pronóstico y se trata de un ejercicio para observar la relevancia del crecimiento de abril. Este cálculo puede cambiar pues las cifras del IOAE tienden a mostrar revisiones significativas y el próximo 26 de mayo se publicará la revisión a las series del PIB”, acotó.
En una lectura cuatrimestral, Marcos Daniel Arias Novelo, de Monex, observó que la tasa promedio de crecimiento en el periodo de enero a abril asciende a 0.27% mensual, es decir, de 3.28% anualizado.
“La economía ha tenido su tercer mejor arranque de los últimos 10 años y ahora el piso de crecimiento para 2023 se ubica cerca de 2.00%, pero si se logra sortear el declive anticipado para el segundo semestre las probabilidades de tener un mejor resultado que el de 2022, de 3.1%, serán elevadas”, dijo.
A pesar de un entorno económico desafiante, con una política monetaria restrictiva, un entorno geopolítico incierto y con la persistencia de presiones inflacionarias, el experto señaló que existe una mejoría en las condiciones que parece estar conectada a la dinámica externa.
“La economía mexicana se seguirá beneficiando del empuje de la demanda externa en el corto plazo y estaremos revisando al alza nuestros pronósticos de crecimiento en los siguientes días”, comentó.
