Los rendimientos del Tesoro a 10 años subieron el miércoles a un máximo de cuatro semanas, mientras que los a dos años, sensibles a las tasas de interés, tocaron su mayor nivel en cinco semanas, impulsados por un alza de los retornos en el mundo debido a la inflación británica y la posibilidad de que la Fed siga subiendo las tasas.
Gran Bretaña fue el único país de Europa occidental con una inflación de dos dígitos en marzo.
La inflación de los precios al consumidor (IPC) cayó a una tasa anual del 10,1%, por debajo del 10,4% de febrero, pero muy por encima del 9,8% previsto por economistas encuestados por Reuters y del 9,2% pronosticado por el Banco de Inglaterra en febrero.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos subieron a raíz de los datos británicos, mientras que los inversores también están “despertando a la posibilidad de que la Fed no haga una pausa”, dijo Jim Vogel, estratega de tasas de interés de FHN Financial.
Los rendimientos cayeron en marzo, cuando los inversores acudieron en masa a refugiarse en la deuda ante la preocupación por el contagio de la quiebra de dos bancos regionales, entre ellos el Silicon Valley Bank.
Ahora los retornos están subiendo, ya que el sector bancario parece estable y los datos económicos también apuntan a una economía todavía relativamente fuerte.
Varias autoridades de la Reserva Federal han adoptado un tono duro sobre la necesidad de seguir subiendo las tasas para reducir la inflación, pese a que los mercados consideran probables recortes de tasas este año.
Los operadores de futuros de los fondos de la Reserva Federal están valorando en un 88% la probabilidad de un alza de tasa 25 puntos básicos más en la reunión del banco central de los días 2 y 3 de mayo, y ha crecido la de un alza más de 25 puntos básicos en junio, aunque una pausa sigue considerándose el caso base.
Los rendimientos de referencia a 10 años subían al 3,639%, el nivel más alto desde el 22 de marzo, tras el mínimo de siete meses del 3,253% del 6 de abril.
El retorno a dos años alcanzó el 4,286%, el nivel más alto desde el 15 de marzo. La inversión de la curva de rendimientos entre los bonos a dos años y a diez años se ha profundizado hasta -64 puntos básicos.
