En este episodio de ‘Keiser Report’ Max y Stacy hablan de la creciente adopción del bitcóin en Nigeria tras los intentos del Gobierno nigeriano de prohibirlo. En la segunda parte Max entrevista a Egon von Greyerz, de GoldSwitzerland.com, sobre el cincuenta aniversario del sistema fíat y las consecuencias, todavía presentes, de que Nixon cerrara la ventana del oro el 15 de agosto de 1971.
A pocos días de cumplirse el quincuagésimo aniversario del fin de los acuerdos de Bretton Woods, con el llamado ‘Nixon Shock’, que tuvo lugar el 15 de agosto de 1971, Max Keiser y Stacy Herbert analizan las consecuencias que tiene hasta la actualidad el abandono del patrón oro en esta era caracterizada por la emisión ilimitada de moneda.
Keiser recuerda que el bitcóin es “un mecanismo internacional de almacenamiento de valor de primer nivel”, por lo que constituye una forma monetaria mundial, lo que viene siendo en ese aspecto algo similar al oro. Así, la principal criptomoneda tiene el potencial de competir con el dinero fíat y puede acabar con él y con los bancos centrales que lo manejan.
Si bien los principales candidatos para convertirse en líderes en la adopción del bitcóin son países dominantes como China, EE.UU. o el Reino Unido, el problema es que tienen oligopolios arraigados al sistema fíat y fácilmente siempre pueden adoptar posiciones autoritarias frente a sus ciudadanos. Pero por otro lado se encuentra Nigeria, una nación que sufre las consecuencias de la inflación, donde ya se está produciendo “una ‘hiperbitcoinización’ de la economía”, explica Keiser.
En ese sentido, considera que “el bitcóin supone un renacimiento para todo el mundo” y ese renacimiento parece que puede empezar en Nigeria. “El caso es que el bitcóin nos ayuda a sortear todos esos oligopolios tan arraigados, fomentando la soberanía, los derechos y la creatividad del individuo”, subraya Keiser llamándola “la forma monetaria más dura e inconfiscable jamás creada en los últimos 400.000 años”.
Por su parte, Stacy hace hincapié en que “la ‘hiperbitcoinización’ ya es una realidad”, sobre todo en países como El Salvador o Nigeria, donde las remesas desempeñan un papel esencial en la economía, poniendo un fin al sistema regido por el dólar.
Hablando sobre las consecuencias del ‘Nixon Shock’, Egon von Greyerz, de GoldSwitzerland.com, señala que “la inflación ya se ha instalado en todos los mercados”. “La gente ahora piensa que es normal que el precio de las acciones o el de la vivienda se dupliquen cada pocos años, cuando eso no es lo habitual; lo habitual es que suba una media de un 1 %, como ocurrió durante 171 años, desde 1800 hasta 1971”, reflexiona.