Los precios del petróleo bajaban el viernes hacia los 74 dólares por barril y se encaminaban a un cuarto trimestre consecutivo de pérdidas, en medio de la preocupación por la atonía de la actividad económica mundial y la demanda de combustible.
Los futuros del crudo referencial Brent para entrega en septiembre perdían 5 centavos, o un 0,1%, a 74,46 dólares el barril a las 1120 GMT, tras haber subido anteriormente más de un 1%. El contrato a mes inmediato, que vence el viernes, subía 16 centavos a 74,50 dólares.
El contrato se encaminaba a una caída cercana al 7% en los tres meses transcurridos hasta finales de junio, lo que supondría su cuarto descenso trimestral consecutivo. Los precios están en su nivel más bajo en 2 años.
El crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) bajaba 11 centavos, o un 0,2%, a 69,75 dólares. El contrato ha bajado casi un 8% en el trimestre, su segunda caída trimestral consecutiva.
La presión inflacionaria y la subida de las tasas de interés en las principales economías, así como una recuperación más lenta de lo previsto de la industria y el consumo chinos, han lastrado los mercados en los últimos meses.
Sin embargo, los indicios de fortalecimiento de la actividad económica estadounidense y el fuerte descenso de los inventarios de petróleo en Estados Unidos la semana pasada ofrecieron apoyo.
Los planes de Arabia Saudita de recortar la producción en 1 millón de barriles diarios en julio, sumados a un acuerdo más amplio de la OPEP+ para limitar la oferta hasta 2024, ofrecen un apoyo adicional.
“A pesar de los anuncios de dos nuevas rondas de recortes por parte de la OPEP+/Arabia Saudita, los precios del crudo se han mantenido en gran medida por debajo de los 80 dólares el barril, ya que el mercado se ha visto impulsado menos por los fundamentos y más por las preocupaciones macroeconómicas”, señalaron los analistas de HSBC en una nota.
Una encuesta realizada por Reuters a 37 economistas y analistas mostró que los precios del petróleo tendrán dificultades para remontar este año, ya que persisten los factores adversos de la economía mundial.
