La Sociedad para las Comunicaciones Interbancarias y Financieras Mundiales —SWIFT, por sus siglas en inglés—, se fundó en Bruselas en 1973 con el propósito de establecer un lenguaje común para las transacciones financieras en el mundo sobre un sistema de procesamiento de datos y una red de telecomunicaciones.
Las alternativas
“El sistema ruso, por su parte, se presenta como otra opción confiable, pero su expansión internacional pasa por el fortalecimiento de las debilidades que hoy presenta el sistema y del mantenimiento de su alianza estratégica con China”, destaca el especialista.
La mirada latinoamericana
“En principio, este programa debe reunir a todas las instituciones financieras de Latinoamérica. Este paso supondría un importante avance a favor de una mayor autonomía financiera regional;
Una segunda etapa sería lograr la conexión internacional. Sin embargo, debido a la multiplicidad de programas de codificación existentes (SWIFT, BRICS, CIPS, SPFs, IBAN), lograr que el sistema permita una conexión compatible y capaz de compartir la información parece la opción más viable;
El sistema deberá ser pensado para que la información que brinde pueda ser compartida. Ningún país ha de poseer su mando, cada uno debe tener la posibilidad de mirar el tablero de sus respectivas transacciones dentro de los límites de su propia legislación;
Es necesario que el sistema cubra estratégicamente la mayor cantidad de horas activas, incluyendo feriados y fines de semana. La carencia de esa capacidad se registra en otros sistemas y se convierte en un escollo para las transacciones con el resto del mundo;
Debe tener capacidad para interactuar en diferentes idiomas y sistemas de caracteres, incluso el chino;
Internamente, el precio de las transferencias debe minimizarse, tal como ocurre dentro de cada país. A nivel internacional, el costo dependerá de la combinación de los sistemas usados;
Debe realizarse un estudio pormenorizado de las regulaciones técnicas. Estas deben garantizar todos los requerimientos de calidad y seguridad necesarios, pero no constituirse en una traba burocrática”.