El dólar estadounidense subía ligeramente el martes tras una fuerte racha alcista, aunque los operadores se abstenían de hacer grandes apuestas a la espera de una serie de datos económicos esta semana, mientras que el yen japonés languidecía cerca de los niveles que provocaron una intervención el año pasado.
Frente a una cesta de divisas, el dólar subía un 0,14% a 104,88, tras caer un 0,2% el lunes.
El índice ha subido más de un 2% este mes y viene de una racha de seis semanas de ganancias, ya que los sólidos datos económicos de Estados Unidos han reforzado las expectativas de que las tasas de interés podrían seguir subiendo durante más tiempo.
Esa opinión cobró más fuerza después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, sugirió el viernes que podrían ser necesarias nuevas subidas de las tasas de interés para enfriar una inflación todavía demasiado alta, aunque su promesa de actuar con cautela en las próximas reuniones generó cierta incertidumbre.
Los datos sobre el gasto en consumo personal, el indicador de inflación preferido de la Reserva Federal, se publicarán el jueves, y las nóminas no agrícolas, el viernes, aunque las cifras de vacantes de empleo de julio, que se publicarán el martes, ayudarán a marcar la pauta. Los economistas encuestados por Reuters esperan que el número de ofertas de empleo se sitúe en 9,465 millones, ligeramente por debajo de junio.
Según la herramienta FedWatch de CME, los mercados están valorando en un 78% la posibilidad de que la Reserva Federal mantenga sin cambios las tasas de interés el mes que viene, pero las probabilidades de una subida para la reunión de noviembre se sitúan ahora en torno al 60%, frente al 42% de una semana antes.
El euro cotizaba plano a 1,081 dólares y la libra operaba estable a 1,260 dólares, alejándose de los mínimos de dos meses que tocó la semana pasada.
La creciente diferencia de tasas de interés entre Japón y Estados Unidos ha presionado al yen, ya que los bajos rendimientos del país hacen que la divisa sea un objetivo fácil para los vendedores en corto y apropiada para las operaciones de financiación.
La divisa japonesa cotizaba el martes a 146,69 unidades por dólar, muy cerca de los 146,75 de la víspera, su nivel más bajo desde el 9 de noviembre. La divisa asiática ha perdido un 11% frente al dólar en lo que va de año.
Japón intervino en los mercados de divisas el pasado mes de septiembre, cuando el dólar superó los 145 yenes, lo que llevó al Ministerio de Finanzas a comprar yenes y hacer retroceder el par hasta los 140 yenes.
