“Los países del G20 se han puesto aquí de acuerdo en que quieren abordar un nuevo orden tributario internacional”, dijo el ministro alemán de Finanzas, Olaf Scholz, en Venecia (Italia).
El ministro alemán de Finanzas, Olaf Scholz, afirmó que el G20 ha llegado a un acuerdo para respaldar el mecanismo de fiscalidad para multinacionales consensuado el 1 de julio por 130 países y jurisdicciones de los 139 que forman parte del llamado marco inclusivo de la OCDE.
“Los países del G20 se han puesto aquí de acuerdo en que quieren abordar un nuevo orden tributario internacional”, dijo Scholz en Venecia (Italia).
Los ministros de Finanzas y gobernadores de los bancos centrales del G20 se han reunido durante dos días en Venecia y han llegado a un acuerdo político para secundar este sistema, que tratará de evitar que las multinacionales evadan impuestos o desvíen sus beneficios a paraísos fiscales.
Este sistema se basa en dos pilares, el modo de asignar un porcentaje de los beneficios de las empresas, en particular de las digitales, a ciertas jurisdicciones para que paguen impuestos donde operan aunque no tengan presencia física; y en la aplicación de un tipo mínimo del impuesto de sociedades de, al menos, el 15% a las empresas con una facturación como poco de 750 millones de euros.
Scholz calificó de “gran momento histórico” el acuerdo en el marco del G20 y dijo que cuando se alcanzó el consenso “se rompió en un aplauso” en la sala, porque “todo el mundo entendía que algo grande estaba pasando”.
Preguntado sobre si será posible que se sumen al acuerdo otros países reticentes de la Unión Europea (UE), como Irlanda, Hungría o Estonia, que han atraído durante años a inversión privada por sus tipos tributarios bajos, confió en que lo apoyen.
“Estoy absolutamente seguro de que habrá un acuerdo en octubre”, afirmó el ministro alemán, convencido del poder de arrastre que tiene el G20, que representa “el 90% del (Producto Bruto Interno) PBI global”.