El Gobierno de Argentina ha anunciado este viernes que reducirá los aranceles y los impuestos del sector de la automoción a fin de hacerlo más competitivo e impulsar su crecimiento, “que actualmente tiene el 10% de la producción total industrial y genera más de 75.000 empleos” en el país.
“Con el objeto de mejorar la competitividad e impulsar el crecimiento del sector automotriz, lanzaremos una rebaja de aranceles e impuestos que beneficiará a este sector”, ha anunciado el ministro de Economía argentino, Luis Caputo, en su cuenta en la red social X, antes Twitter.
Caputo ha asegurado, además, que “se mantendrá la exención de derechos de exportación para las exportaciones incrementales que estaba vigente desde 2021 y se sistematizará y digitalizará el régimen de Reposición de Existencias (Repostock)”.
Del mismo modo, a partir de junio de este año, “se homologarán los ensayos de Licencias para la Configuración de Modelos (LCM) con Brasil para que no sea necesario duplicar aquellos ensayos que ya están reconocidos por el país vecino y viceversa”.
La implementación de estas medidas, ha asegurado el titular de Economía de Argentina, “permitirá que los proveedores vendan partes a las terminales con una rebaja de aranceles e impuestos y que se genere una caída en el costo de las autopartes nacionales con destino a exportación”.
Así, el Ejecutivo argentino espera que los aranceles bajen de un 35% a un 12,6% en el caso de los moldes de metales y de un 24% a un 12,6% cuando se trate de moldes de inyección plástica.
Por su parte, el portavoz del Gobierno de Argentina, Manuel Adorni, ha comunicado que el Grupo Stellantis -que aglutina compañías del sector del automóvil como Peugeot, Citroën, Fiat o Jeep- invertirá 270 millones de dólares (alrededor de 250 millones de euros) para fabricar un nuevo modelo en su planta de la ciudad de El Palomar, en Buenos Aires, y otros 400 millones de dólares (cerca de 375 millones de euros) para la producción de futuros modelos en el período 2025-2030, según ha recogido ‘La Nación’.