Para tener dinero el Tesoro podría suspender las inversiones en programas de pensiones o directamente tomar dinero prestado de esos fondos. El gobierno ha gastado una gran cantidad de dinero en programas para mantener a flote la economía
El tema sobre el alza del techo de deuda de Estados unidos se ha vuelto en los últimos días un dolor de cabeza para la administración Biden debido a la negativa de los republicanos a aumentar el endeudamiento del país antes del 2 de agosto. En dicha fecha, el gobierno tendrá que tomar acciones extraordinarias para pagar sus facturas.
Según EFE, los desacuerdos entre demócratas y republicanos podrían tener enormes implicaciones tanto para la economía global como para la agenda del presidente Biden. La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, avisó al Congreso de que el 2 de agosto tendrá que tomar “ciertas medidas extraordinarias” para evitar que se incumplan sus obligaciones en caso de que los republicanos y los demócratas no lleguen a un acuerdo.
En concreto, si eso ocurre, el gobierno tendría que cerrar, como ha sucedido tres veces en la última década, o podría incurrir en incumplimiento de pagos, cosa que no es en nada positiva para el desarrollo económico del país.
Ante esa posibilidad, Yellen adelantó a los legisladores que a finales de julio el Departamento del Tesoro suspenderá la venta de bonos, la vía con la que Estados Unidos financia su deuda, situación que hacer ver que el escenario que se vive no es sencillo. Esta sería solo una de las primeras “medidas extraordinarias” que podría tomar el Tesoro para seguir pagando a tiempo las facturas.
Entonces para garantizar tener dinero, el Tesoro podría suspender las inversiones en programas de pensiones o directamente tomar dinero prestado de esos fondos, unas acciones que ya ha adoptado en varias ocasiones en el pasado y que entonces prolongaron la capacidad de pago del Ejecutivo durante meses.
Según EFE, esta vez, la situación es distinta porque el gobierno federal está gastando una gran cantidad de dinero en programas para mantener a flote la economía por el impacto de la Covid-19.
Yellen reconoció en que existe “incertidumbre” sobre cuánto tiempo podrían durar esas “medidas extraordinarias” porque, al “desafío” de pronosticar los pagos e ingresos del gobierno durante meses en el futuro, se suma la “incertidumbre” generada por el costo de las medidas de estímulo de la pandemia.
Según un análisis de julio de la Oficina de Presupuesto del Congreso, esas “medidas extraordinarias” permitirían tener efectivo a Estados Unidos hasta octubre o noviembre, momento en el que se produciría la temida suspensión de pagos de la deuda soberana. Estados Unidos nunca ha llegado a esa situación, pero ha estado cerca.