Hoy, en las Comisiones Económicas Conjuntas del Congreso de la República, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, presentó el Presupuesto General de la Nación 2025. El cálculo quedó en $523 billones, $20 billones más que el PGN de 2024.
Además, mencionó el plan de reforma tributaria por $12 billones (más de US$ 2.950 millones) para cumplir con los ingresos del presupuesto, que tramitará a más tardar el 15 de septiembre. “Esta ley de financiamiento deberá llegar a este Congreso antes de que discutamos el monto del presupuesto”, dijo Bonilla.
Lo que se sabe de esta reforma es que pretende reducir la tasa corporativa de renta de 35% a 30%.
De este monto, $327 billones corresponden a gastos de funcionamiento (62,7%), lo que representa un aumento de 6,2% en comparación con 2024; $112,6 billones al servicio de deuda (21,5%), con un incremento del 19,1% respecto al año actual; y $82,5 billones a la inversión (15,8%), lo que supone una disminución del 17,4% en comparación con 2024.
“Los gastos de funcionamiento apenas cubre la inflación”, dijo Bonilla. “Pagar deuda sacrifica inversión, y sacrifica reactivación económica”.
Ahora bien, la inversión, se distribuye de la siguiente manera:
- Minas y Energía con $36,1 billones.
- Transporte con $13,5 billones.
- Igualdad y Equidad con $10 billones
- Resto de sectores con $8,1 billones.
- Educación con $7,4 billones.
- Inclusión Social con $7,4 billones.
Por otro lado, el gasto en el pago de la deuda aumentaría del 5,6% del PIB en 2024 a 6,3% en 2025, lo que representa un incremento de 1,4% en comparación con 2019. De este nuevo porcentaje, 3,3% correspondería a intereses y 3% a la deuda principal.
Los ingresos totales sumarán $511 billones, y apostarán por una Ley de financiamiento por $12 billones para completar el PGN 2025.
Los ingresos corrientes del presupuesto ascenderán a $305,8 billones. De este monto, $266,6 billones provendrán de impuestos recaudados por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) y $37,9 billones de impuestos externos.
Los recursos de capital sumarán $155,8 billones, los establecimientos públicos (como el SENA y el ICBF) aportarán $27,3 billones, y los fondos especiales (como el SOAT y la solidaridad pensional) contribuirán con $18,1 billones.
En los supuestos, se estima un cierre de inflación de 3,2% en 2025, lo que representa una disminución de 2,1 puntos porcentuales respecto a 2024 (5,3%). La tasa de cambio se proyecta en $4.179 y se espera una variación del PIB Real de 3%, lo que supone un incremento de 1,3 puntos porcentuales en comparación con 2024. Además, se prevé un aumento del 2,5% en las importaciones totales, 3,1 puntos porcentuales más que en 2024, mientras que el déficit de cuenta corriente de la balanza de pagos se mantendría estable en -2,5%.