El Banco Central Europeo podría subir los tipos de interés en 25 o 50 puntos básicos en la reunión del próximo mes de mayo. Esto dejaría el tipo de interés sobre la tasa de depósito (el tipo más importante en la Eurozona) en el 3,25% o 3,5%. Después de este movimiento, los ‘halcones’ (defienden una política monetaria más estricta respecto a las ‘palomas’) podría forzar entre una y dos subidas más de tipos, según la encuesta realizada por Bloomberg.
Según la encuesta realizada en abril por la agencia financiera Bloomberg, el Banco Central Europeo está listo para implementar tres subidas más de un cuarto de punto en mayo, junio y julio, dicen los economistas encuestados por Bloomberg. Esta semana se publicarán también las actas de la pasada reunión, lo que dará pistas sobre el futuro.
Eso llevaría la tasa de depósito a 3,75%, donde se mantendría durante el resto del año, según la encuesta del 5 al 13 de abril. La encuesta muestra que las expectativas de los economistas están en línea con las de los inversores, quienes han reducido las apuestas en el pico de este ciclo de alzas después de los colapsos bancarios en EEUU y Suiza.
La semana pasada, los funcionarios del BCE mostraron ciertas diferencias, pero en el fondo sus palabras dejaban la puerta abierta a la flexibilidad. El debate a corto plazo sigue siendo si subir los tipos en 25 o 50 puntos básicos en mayo, pero en general se da por hecho que el BCE podría ralentizar el ritmo de subidas, pese a las presiones de los ‘halcones’.
Los miembros del Consejo de Gobierno (el órgano que decide los movimientos del BCE junto al Comité Ejecutivo) del BCE durante el fin de semana destacaron la divergencia de puntos de vista dentro del seno del BCE.
El gobernador del Banco de Portugal, Mario Centeno, comentó que preferiría una pausa o un aumento de 25 puntos básicos en la reunión del BCE del próximo mes. Por el contrario, el presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, señaló que “la inflación es demasiado alta y nosotros (el BCE) tenemos que hacer más con los tipos de interés”, aunque sugirió que es probable que la inflación subyacente “retroceda antes de las vacaciones de verano”.
El gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, argumentó que “la mayor parte” del ciclo de ajuste del BCE ya está completo y señaló los retrasos inherentes a la política monetaria, es decir, que tiempo que transcurre entre las subidas de tipos y su impacto en la economía real.
Por su parte, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, aseguró que era una desaceleración en el crecimiento del crédito bancario “pesaría excesivamente sobre el crecimiento”, pero a la vez podría ayudar al BCE a reducir la inflación. Estas son unas declaraciones inconclusas, que dejan la puerta abierta tanto a más subidas de tipos como a no hacer nada más.
El pasado viernes, al cierre de las bolsas, el gobernador del banco central finlandés, Oli Rehn, instó al BCE a “continuar” y “actuar de manera consistente” en lo que respecta a un mayor ajuste.
De modo que lo único que parece seguro es que el BCE volverá a subir los tipos de interés en el mes de mayo (estas son las próximas reuniones). Sin embargo, lo que no está claro es en qué cuantía lo hará y qué pasará en las próximas reuniones. Desde Bloomberg lo tienen claro, los tipos de interés tocarán techo en el 3,75%.