Las acciones de algunos de los mayores bancos europeos caían el jueves, después de que una serie de resultados decepcionaran a los inversores, preocupados ya por la posibilidad de que los márgenes de beneficio hayan tocado techo justo cuando las perspectivas económicas de la región se oscurecen.
El índice bancario europeo retrocedía un 2,4%, hasta su mínimo en cuatro meses, a las 1017 GMT. Los valores que más caían en el índice eran Standard Chartered (LON:STAN), un 9%, Swedbank , un 7% y BNP Paribas , alrededor de un 4%.
Los movimientos de las acciones centraban la atención en el Banco Central Europeo antes de su esperada decisión de mantener sin cambios los tipos de referencia más tarde el jueves, poniendo fin a una racha de 15 meses de subidas.
Los grandes bancos se han beneficiado enormemente de la subida de los tipos, diseñada para frenar la inflación galopante, ya que les ayuda a aumentar los ingresos por créditos, aunque eleva el riesgo de impagos. Sin embargo, los inversores temen que esta tendencia llegue a su fin.
“No me gustaría ser un banquero central intentando fijar los tipos de interés en estos momentos. Hay muchos indicadores contradictorios”, afirmó Chris Hiorns, responsable de multiactivos y renta variable europea de EdenTree.
Los bancos siguen siendo inversiones atractivas, añadió Hiorns, pero la caída en el volumen de las operaciones corporativas en todo el mundo está perjudicando a los bancos con grandes ramas de inversión.
La caída de las acciones bancarias ocurre en un contexto de creciente nerviosismo en los mercados por la ralentización del crecimiento europeo y la persistencia de elevados rendimientos de los bonos estadounidenses.
Operadores dijeron que había indicios de que los fondos estaban deshaciendo posiciones, incluso en el sector bancario europeo, uno de los más rentables este año.
“Creo que son reacciones nerviosas ante situaciones de incertidumbre. (…) Tiene sentido reducir el apalancamiento en un momento de incertidumbre y muchas cestas se construyen utilizando apalancamiento”, dijo Angelo Meda, responsable de renta variable de Banor SIM en Milán.
Meda añadió que los beneficios globales del sector bancario seguían pareciendo sólidos, pero que las preocupaciones macroeconómicas empezaban a pasar factura.
La actividad empresarial de la zona euro empeoró por sorpresa este mes, según un sondeo publicado el martes, lo que sugiere que el bloque podría entrar en recesión.
La preocupación por la fragilidad económica de China también está afectando a algunos bancos europeos con importantes operaciones en Asia.
Standard Chartered, que cotiza en Londres, anunció un desplome de sus beneficios motivado por un impacto combinado de casi 1.000 millones de dólares derivado de su exposición a los sectores inmobiliario y bancario chinos. Sus acciones cayeron hasta un 17% en la apertura, lo que provocó una breve suspensión automática de la cotización.
El francés BNP Paribas (EPA:BNPP), el mayor banco de la zona euro, presentó unos resultados trimestrales en línea con las previsiones, pero varios analistas señalaron una debilidad inesperada en sus actividades minoristas y de financiación al consumo.
El índice FTSE 350 Banks marcó su mínimo desde marzo, con un descenso del 2,5%.
Sin embargo, varios bancos españoles parecían resistirse a la tendencia bajista. Sabadell (BME:SABE) avanzaba alrededor de un 3,7% tras elevar sus perspectivas de crecimiento del margen de intereses para 2023 gracias a la subida de los tipos de interés.
