Recaudación fiscal se mantuvo por debajo del promedio de las economía de países de América Latina.
El Marco Macroeconómico Multianual (MMM) presentado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), señala que entre 2000 y 2020, la recaudación fiscal de Perú como porcentaje del PBI (20.1%) se mantuvo por debajo del promedio de las economías de mercados emergentes y en desarrollo (26.1% del PBI), así como de los países de América Latina y el Caribe (27.3% del PBI).
Según el documento, esta baja recaudación se asocia principalmente con los elevados niveles de evasión y elusión del IR (2019: 49.5% de la recaudación potencial) e IGV (2020: 38.1%) de la recaudación potencial.
De acuerdo al MEF, los factores que generan esta pérdida son tres: falta de información tributaria y financiera de administración tributaria, uso indebido de operaciones elusivas para reducir el pago de los impuestos y el incremento de la informalidad.
“Los altos niveles de incumplimiento generan una pérdida en la recaudación de alrededor de 8% del PBI (S/ 69,106 millones) ante la falta de información tributaria y financiera con la que cuenta la administración tributaria, el uso indebido de operaciones elusivas para reducir el pago de los impuestos y el incremento de la informalidad, que en el último año estuvo asociado con la crisis económica por la pandemia de la COVID-19″, se detalla.
El MEF destaca que en los últimos años, estas medidas continuaron implementándose con la adopción de herramientas complementarias que permiten diseñar nuevas técnicas de detección del incumplimiento y reforzar las ya existentes. Por ejemplo, en el proceso de transformación digital del sistema tributario, la mayor cobertura de los comprobantes de pago electrónicos (94% a mayo 2021) brinda a la Sunat información consistente y detallada de las operaciones realizadas por los contribuyentes.
Asimismo, resaltan que se ha continuado con la implementación de las medidas de fiscalidad internacional de la OCDE que refuerzan la capacidad de la administración tributaria para la detección de actos elusorios.
“Vale mencionar que estas medidas culminarán de implementarse entre 2021-2022 y alcanzarán su efecto potencial hacia 2025. (…) Con ello, entre 2023-2025, los ingresos del gobierno general crecerían 49% real en promedio y pasarían de 20% en 2023 a 20.4% del PBI en 2025 (presión tributaria del gobierno central: 15.5% del PBI”, precisa el MEF.
Gastos tributarios
Por otro lado, se prevé que en 2022 los gastos tributarios generen una pérdida potencial en la recaudación equivalente a S/ 17,622 millones (2.04% PBI). Según tipo de impuesto, la mayor parte de dicho gasto está asignado en el IGV (73.9%), principalmente en la exoneración de productos agrícolas, la exoneración del IGV en la Amazonía y en la inafectación a la importación de productos y prestación de servicios educativos.
“A ello se suman los gastos tributarios del impuesto a la renta de personas jurídicas (7.7%) y naturales (7.6%), tales como la aplicación de tasas diferenciadas en beneficio de algunos sectores productivos y la inafectación de la CTS de los trabajadores, respectivamente”, precisa el MEF en el MMM.
Cabe resaltar que la proyección del gasto tributario potencial de 2022 se ha incrementado en S/ 1,680 millones respecto a lo estimado para el año 2021. Este crecimiento está concentrado en el IGV (+S/ 1 232 millones) y en el impuesto Ad Valorem (+S/ 526 millones), el cual resulta ligeramente atenuado por la reducción del gasto proyectado para el impuesto a la renta de personas naturales (-S/ 180 millones).
Por sectores
A nivel de sectores, la mayor parte del gasto tributario está concentrado en beneficios dirigidos a bienes y servicios de aplicación general (32.9%), seguido de sectores específicos como agropecuario (31.6%), intermediación financiera (12.5%) y educación (9.5%).
Asimismo, el gasto tributario proyectado para 2022 se ha incrementado respecto al año anterior en todos los sectores, excepto en el sector de intermediación financiera (-S/ 81 millones). Este incremento se concentra en los bienes y servicios de aplicación general (+S/ 577 millones), así como en los sectores educación (+S/ 367 millones), agropecuario (+S/ 280 millones), hidrocarburos (+S/ 172 millones) y salud (+S/ 166 millones).