México se perfila para liderar las exportaciones de autos eléctricos a Estados Unidos en 2024, si mantiene la tendencia mostrada hasta la primera mitad del año en curso y de acuerdo con estadísticas del Departamento de Comercio estadounidense.
De enero a junio del año actual, México exportó estos vehículos por un valor de US$ 3.127 millones a su vecino del norte, un aumento interanual de 171,9%.
Solo fue superado por Alemania, cuyas ventas crecieron 7,8%, a US$ 3.213 millones.
Ya en 2023, México desplazó a Corea del Sur del segundo lugar en esta clasificación y dejó atrás a otros competidores como Japón, Bélgica y Reino Unido.
Progresivamente, los estadounidenses han aumentado las compras de autos eléctricos impulsados por una mayor conciencia ambiental, incentivos gubernamentales y porque tanto las baterías como la infraestructura para cargarlos está mejorando.
Desde todo el mundo, las importaciones de autos eléctricos al mercado estadounidense aumentaron 36,1% en la primera mitad de 2024, alcanzando US$ 11.952 millones.
México no sólo comparte una frontera con Estados Unidos, sino que también está profundamente integrado en las cadenas de suministro en América del Norte, reguladas por el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
En este contexto, varios fabricantes de automóviles aprovechan esta relación para expandir sus operaciones en México. Por ejemplo, BMW y Audi producen vehículos eléctricos en el país, aprovechando las ventajas que ofrece el T-MEC.
A partir de las nuevas inversiones, las exportaciones mexicanas de automóviles eléctricos a Estados Unidos dieron un salto de 2020 a 2021, pasando de US$ 25 millones a US$ 1.732 millones.
Un aspecto adicional es que se ha reportado que la empresa china BYD está en busca de ubicaciones estratégicas en México para establecer nuevas instalaciones de producción.
El miércoles pasado, el director general de BYD en México, Jorge Vallejo, comentó a la agencia Reuters que los incentivos ofrecidos por tres estados mexicanos donde podría establecerse la nueva planta incluyen ventajas fiscales, terrenos, gestión y precios preferenciales. Sin embargo, Vallejo se abstuvo de revelar las entidades finalistas.
En relación a ese mismo proyecto, el gobierno federal de México suspendió en abril los incentivos a los fabricantes chinos de vehículos eléctricos debido a la presión ejercida por Estados Unidos.
A pesar de este cambio en la política, BYD ha anunciado que su planta en México no estará destinada a abastecer el mercado estadounidense.
China domina la producción mundial de vehículos eléctricos y enfrenta restricciones arancelarias para ingresar al mercado de Estados Unidos.
De acuerdo con el centro de investigación y análisis Atlantic Council, a menos de que se dé una respuesta política, es probable que sea sólo cuestión de tiempo antes de que los vehículos eléctricos de China estén bien posicionados para ingresar al mercado estadounidense, ya sea directamente a través de la exportación o indirectamente a través de reexportaciones desde terceros países.
Los fabricantes de automóviles establecidos en México incluyen Audi, BMW, Ford Motor Company, General Motors, Honda, Hyundai, JAC, Kia, Mazda, Mercedes Benz, Nissan, Stellantis, Toyota y Volkswagen.
Tesla anunció una nueva planta que se construirá en el estado mexicano de Nuevo León como parte de su producción de vehículos eléctricos, aunque informó recientemente que está a la espera de quién ganará las elecciones presidenciales de Estados Unidos y las regulaciones consecuentes para el sector.
En respuesta, el gobierno de México criticó la especulación de Tesla, cuestionó el anuncio de Musk diciendo que “no es serio” y conjeturó que la empresa podría tener otro plan de negocio.