Los futuros de Estados Unidos apuntan a una apertura ligeramente a la baja a la espera del inminente comienzo de la última reunión de política monetaria de la Reserva Federal, mientras que Pfizer lidera la lista de informes de resultados de la jornada y las negociaciones sobre el techo de la deuda en Washington se enfrentan a un plazo más ajustado de lo previsto. Por su parte, la inflación de la zona euro aumenta antes de la reunión del Banco Central Europeo de esta semana. Aquí tenemos las cinco cuestiones principales de las que hay que estar pendientes este martes, 2 de mayo, en los mercados financieros
Los futuros de las acciones de Estados Unidos caen este martes, aunque se mantienen sin apenas cambios, ya que la atención se centra en lo que podría ser una reunión crucial de la Reserva Federal (véase más adelante) y en una serie de datos del mercado laboral que han levantado gran expectación.
A las 11:25 horas (CET), el contrato de futuros del Dow desciende 74 puntos básicos o un 0,22%, los futuros del S&P 500 se dejan 8 puntos o un 0,15% y los futuros del Nasdaq 100 retroceden caía 4 puntos o un 0,03%.
En cuanto a los datos económicos, este martes se publican la Encuesta sobre rotación de personal y el informe de vacantes de empleo (JOLTS). Este informe, que registra las ofertas de empleo y el número de trabajadores que han decidido dejar sus empleos, ayuda a calibrar el nivel de demanda en el mercado laboral.
Los datos servirán de calentamiento antes del importante informe de empleo de abril del viernes, que se espera apunte a la tercera desaceleración mensual consecutiva del crecimiento del empleo.
El banco central estadounidense ha ajustado enérgicamente su política monetaria durante el último año en un intento de enfriar la inflación, actualmente al rojo vivo, aunque persisten las preocupaciones en torno a en qué medida afectarán estas decisiones al crecimiento. Las cifras del primer trimestre del producto interior bruto apuntaban la semana pasada a una atonía general de la actividad de la mayor economía del mundo.
Pero las recientes turbulencias en el sector bancario —marcadas esta semana por la quiebra de First Republic Bank y la posterior adquisición de la mayor parte de sus activos por parte de JPMorgan— han llevado a muchos observadores a predecir que la Fed hará una pausa tras esta última subida.
En marzo, los responsables de la política monetaria subieron los tipos a su nivel más alto desde 2007. Tras esa reunión, las previsiones de la Fed indicaban que es probable una subida más de un cuarto de punto en 2023.
Pfizer se encuentra entre las principales empresas estadounidenses que publicarán sus últimos resultados este martes, con los inversores deseosos de ver cómo se comporta la demanda de los productos COVID-19 del gigante farmacéutico.
También se espera que los inversores se interesen por las posibles novedades en torno a la compra de la empresa biotecnológica Seagen en marzo por 43.000 millones de dólares, que aún está siendo analizada por los organismos reguladores.
Otras empresas que publicarán hoy sus resultados son el fabricante de chips Advanced Micro Devices (NASDAQ:AMD), la cadena de cafeterías Starbucks (NASDAQ:SBUX) y la empresa de viajes compartidos Uber (NYSE:UBER).
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, ha aumentado la presión sobre los legisladores en Washington, advirtiendo de que el Gobierno no podrá hacer frente a sus obligaciones a partir del 1 de junio si no se llega a un acuerdo para elevar o suspender el techo de la deuda.
Estas afirmaciones, emitidas en una carta dirigida el lunes al presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, fijaban un plazo que se adelantaba a lo que muchos en Wall Street esperaban. Los economistas de Goldman Sachs habían situado provisionalmente la llamada “fecha X” —es decir, el día en que el Tesoro ya no puede cumplir sus obligaciones con los tenedores de deuda— en algún momento de finales de julio.
Las declaraciones de Yellen fueron respaldadas por la Oficina Presupuestaria del Congreso, que también estima que el Tesoro se quedaría sin fondos a principios de junio, citando unos ingresos fiscales más débiles de lo esperado.
