El Gobierno de Taiwán ha anunciado este lunes una serie de medidas de apoyo para facilitar a las empresas del país adaptarse al nuevo escenario comercial surgido tras la decisión de Donald Trump de imponer aranceles a países como Canadá, México o China, incluidos servicios de información y ayuda para aquellas compañías taiwanesas que decidan trasladar parte de su capacidad o reubicarse en Estados Unidos.
“En vista de que Estados Unidos ha impuesto aranceles adicionales a Canadá, México y otros países, lo que ha afectado las operaciones en el extranjero de algunos fabricantes taiwaneses, el Ministerio de Asuntos Económicos ha iniciado una serie de medidas de respuesta”, ha anunciado este lunes el Ministerio de Asuntos Económicos de Taiwán con el objetivo de facilitar a las empresas ajustar sus cadenas de suministro y estrategias de inversión.
De este modo, el Ministerio taiwanés ha establecido una línea directa de consulta para ayudar a las empresas del país a abordar la nueva situación tras la introducción de medidas arancelarias por parte de EE.UU. además de brindar asistencia activa a través del Consejo de Desarrollo del Comercio Exterior y las oficinas en el extranjero del Instituto de Investigación de Tecnología Industrial bajo su supervisión.
En este sentido, además de crear un equipo de servicio especial y una línea directa para brindar asistencia inmediata a las empresas, el Ministerio ha anunciado que ofrecerá servicios personalizados a los fabricantes para la distribución en el extranjero, así como información relevante sobre los mercados objetivo para las empresas taiwanesas que tengan la intención de reubicarse en el extranjero.
Así, señala la posibilidad de que empresas taiwanesas decidan mudarse a los Estados Unidos para establecer fábricas o trasladen algunos procesos a otros países, como el sudeste asiático y la India, para lo que ofrecerá información sobre posibles leyes de inversión estatales y locales en Estados Unidos, así como sobre las oportunidades en los mercados relacionados y la asistencia para encontrar socios.
Las autoridades taiwanesas tienen también la intención de establecer un centro de servicios de inversión y comercio en los Estados Unidos para ayudar a las empresas a evaluar el entorno de inversión en cada estado del país, así como asistir en el diseño en el extranjero de las cadenas de suministro.
Por otro lado, buscará reforzar la cooperación industrial entre Taiwán y los Estados Unidos con el fin de ayudar a las empresas taiwanesas en la innovación y la modernización, promoviendo activamente la cooperación en materia de I+D y fabricación entre empresas de ambos países y ayudando a las empresas taiwanesas a encontrar socios locales.
En cualquier caso, el Ministerio ha advertido de que seguirá de cerca los cambios en el panorama del comercio internacional y mantendrá la comunicación con la industria para brindar a los empresarios taiwaneses el apoyo y la asistencia más oportunos “para garantizar que las empresas encuentren las mejores estrategias de respuesta en medio de la situación cambiante”.
Taiwán acoge a numerosas empresas fabricantes de componentes tecnológicos, como el gigante de los microchips TSMC, que pueden resultar vulnerables a las medidas proteccionistas anunciadas por la EE.UU. al contar con fábricas en países como México o China, afectados por la primera andanada de aranceles anunciada por la Administración Trump.