Las Madres de Plaza de Mayo conmemoraron el sábado (30.04.2022) el inicio de su lucha, al cumplirse 45 años de la primera vez que se reunieron en Buenos Aires para reclamar por la aparición de sus hijos secuestrados por la última dictadura militar argentina (1976-1983).
Divididas en dos agrupaciones desde 1986 por diferencias internas, integrantes de ambas entidades se concentraron en actos por separado, uno en Plaza de Mayo frente a la sede del Poder Ejecutivo y otro en el Espacio Memoria y Derechos Humanos, donde funcionó un centro clandestino de detención de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).
La referente de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida, fue homenajeada junto a sus pares en la ex-Esma acompañadas por dirigentes políticos, sociales y culturales.
En medio del homenaje para recordar sus 45 años de lucha y el reclamo de Justicia por sus hijos desaparecidos, Almeida dijo que no fueron “heroínas”. “Hicimos lo que cualquier madre hace por un hijo. Nos llamaron locas y sí, estábamos locas de dolor, de rabia e impotencia”, agregó.
“A pesar de los bastones y las sillas de ruedas, las ‘locas’ seguimos de pie”, cerró Taty Almeida haciendo referencia a sus 91 años.
Por su parte, la Asociación Madres de Plaza de Mayo que lidera Hebe de Bonafini, organizó un acto central donde miles de personas se agolparon frente a la plaza para escuchar a los oradores que reivindicaron cuatro décadas y media de defensa de los Derechos Humanos.
“Reivindicamos la lucha revolucionaria de nuestros hijos”, fue la consigna bajo la cual marcharon las integrantes de la asociación. Entre ellos, tomó la palabra Bonafini que criticó la gestión del presidente argentino Alberto Fernández y su ministro de Economía, Martín Guzmán, ante la crisis económica que afronta el país.
Las Madres nacieron el 30 de abril de 1977, cuando catorce mujeres golpeaban las puertas de diferentes instituciones estatales para recabar algún dato que diera con el paradero de sus hijos, pero al no obtener respuesta decidieron caminar hasta Plaza de Mayo y pararse frente a la Casa Rosada.
En esa época estaban prohibidas las concentraciones públicas de más de tres personas, las madres comenzaron a caminar de dos en dos en torno a la Pirámide de Mayo, el principal monumento de la plaza.
