Son los siete más grandes del mundo. Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá, y juntos forman el G7, un grupo de líderes cuyo peso político, económico y militar es considerado influyente a escala global: entre todos suponen el 65% del producto interno bruto mundial, aunque representan solo el 10% de la población total. Pero, ¿qué temas aborda este grupo y cuál es su papel en el desenlace de la política internacional?
Los países del G7 han “condenado enérgicamente” el ataque iraní a Israel, al que han mostrado “su pleno apoyo” y han llamado a la moderación “para evitar una mayor escalada” en Oriente Medio, tras la reunión de menos de una hora que mantuvieron el pasado sábado por videoconferencia, presidida por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, que ocupa la presidencia de turno.
“Expresamos nuestra plena solidaridad y apoyo a Israel y su pueblo y reafirmamos nuestro compromiso con su seguridad. Con sus acciones, Irán ha dado un paso más hacia la desestabilización de la región y corre el riesgo de provocar una escalada regional incontrolable”, han indicado en un comunicado remitido por la Casa Blanca.
Finalmente, se han mostrado a favor de fortalecer la cooperación para “poner fin a la crisis en Gaza”, trabajar “para lograr un alto el fuego inmediato y sostenible y la liberación de rehenes” por parte del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), incluyendo además un incremento de la asistencia humanitaria “a los palestinos necesitados”.
El G7 surge en plena crisis del petróleo, en 1975 cuando seis países celebraron la Cumbre de Rambouillet, un foro informal donde se daban cita los principales países industrializados con el objetivo de resolver diferencias entre sus miembros y tomar decisiones sobre cómo orientar sus políticas y analizar el estado de la política y las economías internacionales. Un año más tarde, en 1976 pasaron a ser siete, con la entrada de Canadá al grupo.
A partir de 1998 se comenzó a hablar del G8 por la inclusión de Rusia, sin embargo, en marzo de 2014, los miembros del G7 decidieron suspender a Rusia tras su anexión de la región ucraniana de Crimea. Asimismo, la Unión Europea es considerada de alguna manera ‘el octavo miembro’ de este grupo de élite desde 1981 y ha participado en muchas de sus reuniones.
Grandes potencias como China -con la segunda economía más grande del mundo-, India, Brasil o Rusia no están incluidas en este grupo de ‘los importantes’, al que solo se puede acceder por invitación, y su ausencia está históricamente justificada:
A diferencia de otras organizaciones internacionales como las Naciones Unidas o la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el G7 no es una institución formal con estatuto y secretaría, sino un grupo informal de países que se unieron para conversar y coordinar su respuesta a la primera crisis petrolera mundial y que ahora, continúan congregándose para abordar temáticas como la seguridad, la lucha contra el medio ambiente y el terrorismo, entre otras.
Uno de los pilares del Grupo de los 7 son sus valores comunes: “la democracia, el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales, el libre mercado y el respeto por el derecho internacional”, explican desde la página web de la diplomacia francesa. Por eso, precisamente, hay grandes ausencias en este grupo.
China creó en 2020, al margen de los bloques occidentales, junto a 14 países de la región de Asia y el Pacífico, la Asociación Económica Integral Regional (ASEAN), el bloque de libre comercio más grande del mundo, representando casi un tercio de toda la actividad económica.
