Estados Unidos se compromete a mantener el respaldo a Kiev, y el resto de miembros de la OTAN, a reforzar su ayuda
MANUEL V.GÓMEZ
Nadie sabe cuánto va a durar la guerra en Ucrania, pero los aliados occidentales de Ucrania parecen dispuestos a enviarle armas, y darle formación y ayuda humanitaria para que mantenga su esfuerzo bélico mientras pueda sostenerlo. “Nos mantendremos así durante el tiempo que sea necesario”, ha señalado el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, cuando se le ha preguntado por el compromiso con Ucrania al acabar la reunión que ha mantenido en Bruselas con los ministros de Defensa de la OTAN, más el resto de países que apoyan a Ucrania, entre ellos Ecuador. Poco antes, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha anunciado un envío de material de guerra al país invadido por valor de 1.000 millones de dólares (960 millones de euros), el mayor hasta ahora.
De la reunión de este miércoles por la tarde, Austin ha salido con dos mensajes claros: el primero es que los países de la OTAN, más los que se han sumado a ellos, han enviado muchas armas a Ucrania para que pueda defenderse de la invasión rusa; el segundo, que están dispuestos a seguir haciéndolo e, incluso, a aumentar esa ayuda con material cada vez más sofisticado. Austin ha retomado el anuncio que ha hecho Biden y ha añadido lo que ha escuchado en la cita, como el compromiso de Alemania de enviar tres sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes y munición guiada, algo que ha ratificado en Twitter su ministra del ramo, Christine Lambrecht. El estadounidense también ha citado el anuncio de Eslovaquia de enviar helicópteros o nuevas remesas de artillería de Polonia, Holanda y Canadá.
Estos envíos se sumarán a los que se han hecho hasta ahora, de los que tanto Austin como el general Mark A. Miller, jefe del Estado Mayor conjunto de Estados Unidos, han dado bastantes detalles. Este último, por ejemplo, ha destacado que la comunidad internacional ha entregado a Ucrania casi 97.000 sistemas antitanque, “más que tanques hay en el mundo”. “Pidieron 200 tanques. Tienen 237″, ha agregado. También ha señalado que su país ha enviado 6.500 cohetes Javelin, 1.500 Stinger, otros 20.000 sistemas contra blindados… la enumeración ha sido amplia. Y a ella hay que sumar las cifras de militares ucranios entrenados para utilizar armamento como drones.
A pesar de toda esta enumeración, Austin, que también ha sido militar y fue uno de los predecesores de Miller, se ha mostrado comprensivo con la demanda constante de Ucrania de que se le mande más material militar: “El general Miller y yo hemos estado en varias peleas. Y cuando estás en una pelea, nunca te cansas. Siempre quieres más. Siempre crees que necesitas más. Y he estado ahí. Y por eso entiendo de dónde vienen los ucranios. Y vamos a luchar duro para darles todo lo que necesitan. Y, de nuevo, queremos asegurarnos de que estamos centrados en lo que creen que necesitan para esta lucha actual y más allá”.
“La comunidad internacional ha hecho un buen trabajo al entregar estas capacidades, pero nunca es suficiente. Así que vamos a seguir trabajando arduamente para mover tanta capacidad como podamos, tan rápido como podamos, y para garantizar que Ucrania tenga éxito en el campo de batalla”, ha resumido Austin.
Esta reunión se ha celebrado aprovechando que este miércoles y jueves los ministros de Defensa de la OTAN se ven por última vez antes de la cumbre de Madrid, en la que se va a decidir el nuevo concepto estratégico de la Alianza para los próximos años y en la que, probablemente, tendrán un gran protagonismo las solicitudes de ingreso de Suecia y Finlandia.
Hasta ahora, ambas peticiones chocan con la resistencia de Turquía, que reclama a Suecia cambios en su política antiterrorista. Para vencer estas resistencias, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, está en contacto continuo con todos los países de la organización, especialmente con Turquía. De hecho, este miércoles ha mantenido una conversación telefónica con el presidente turco, Recep Tayyip Erdoğan, según ha anunciado él mismo en Twitter.
Sobre si la situación se habrá superado antes de llegar a Madrid, el próximo 28 de junio, Stoltenberg ha señalado antes de comenzar la reunión que está buscando resolverla “cuanto antes, para que Suecia y Finlandia sean miembros de la Alianza”. “No puedo decir cuándo”, ha matizado.