El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha arremetido este martes contra la decisión del presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), Luis Roberto Barroso, para emprender investigaciones por las declaraciones del mandatario contra el sistema de votación electrónico, así como por sus posibles delitos de abuso de poder económico y político, uso indebido de los medios de comunicación, corrupción, fraude o conductas vetadas a agentes públicos.

“Lo que yo digo no es un ataque al TSE; es una lucha directa apenas con una persona: el juez Luis Barroso, que se presenta como dueño de la verdad, como una persona que no puede ser criticada”, ha aseverado el mandatario ultraderechista a sus seguidores, concentrados en las afueras de su residencia oficial en Brasilia, la capital brasileña.

De igual modo, en sus afirmaciones transmitidas en las redes sociales, Bolsonaro ha cargado contra Barroso, acusando al juez de “imponer su voluntad” en busca de un fraude, para favorecer en las elecciones de 2022 al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, que lidera las encuestas de intención de voto.

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Bolsonaro asimismo ha convocado a los brasileños a armarse para hacer frente a un imaginario fraude en su contra en las elecciones de 2022.

El jefe de Estado ha reiterado que no aceptará “elecciones dudosas en 2022”, año en el que está prevista la celebración de los comicios presidenciales.

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Ante las acusaciones infundidas de Bolsonaro sobre la inseguridad del actual sistema de voto electrónico, el TSE de Brasil pidió el lunes a la Corte Suprema de Justicia abrir una investigación administrativa contra el mandatario por “abuso del poder” y su campaña de difamación contra el actual sistema electrónico de votación en las elecciones que utiliza el país desde 1996.