Chengdu, capital de la provincia de Sichuan, inauguró un nuevo aeropuerto de aspecto futurista que podrá atender, como mínimo, a 60 millones de pasajeros al año, informa South China Morning Post.
De esta manera, Chengdu se convierte en la tercera ciudad china después de Pekín y Shanghái en tener un segundo aeropuerto internacional. Su construcción costó unos 70.000 millones de yuanes, o 10.800 millones de dólares.
El primer vuelo desde el Aeropuerto Internacional de Chengdu Tianfu, operado por Sichuan Airlines, despegó el domingo pasado con destino a Pekín.
Se prevé que la nueva instalación, que cuenta con tres pistas, dos terminales y una superficie total de 710.000 metros cuadrados, reduzca considerablemente la carga sobre el aeropuerto de Shuangliu de la ciudad, que en 2020 fue el segundo más activo de China después del de Guangzhou.
El aeropuerto Chengdu Tianfu se encuentra a unos 50 kilómetros del centro de la ciudad y a 84 kilómetros del Centro Nacional de Cría del Panda Gigante, la principal atracción turística de la región.