Ibrahim Muhamad al-Deilami, representante diplomático de Yemen en Teherán, capital de Irán, comparó el sábado la batalla por la liberación de Marib (centro-oeste) con la que resultó en la toma de la ciudad siria de Alepo, y afirmó que la reconquista de Marib sería como un “punto de inflexión” en la guerra impuesta a Yemen.

“La batalla de Marib es como la que lanzó Siria para recuperar a Alepo. La retoma de Alepo cambió el curso de la guerra en el país levantino. Creemos que, si se libera Marib, será fácil liberar el resto de Yemen”, señaló al-Deilami en declaraciones concedidas el sábado a la agencia iraní de noticias Tasnim.

El diplomático yemení destacó el papel “positivo” de las negociaciones con las tribus locales que han facilitado los avances de los combatientes del movimiento popular Ansarolá, y lo han colocado en la puerta de dicha ciudad.

El Ejército y los Comités Populares, conforme al embajador yemení, están decididos a impedir la desintegración del país y a liberar los territorios ocupados.

En otra parte de sus afirmaciones, Al-Deilami anunció planes para declarar una amnistía general al final de la guerra, en virtud de la cual los militantes yemeníes, que han luchado junto a las fuerzas saudíes y emiratíes, deben entregar sus armas para ser considerados ciudadanos normales.

La importancia de Marib en la guerra de Yemen

La importancia estratégica de Marib para todas las partes del conflicto no se discute, ya que hay mucho en juego. Si el Ejército yemení y comités populares logran hacerse con el control de la gobernación de Marib, la coalición saudí sufrirá un golpe del que no podrá recuperarse.

Este posible logro alterará fundamentalmente la posición política de Mansur Hadi en Yemen en un momento en que se están produciendo otros cambios políticos regionales importantes. En conclusión, el resultado de la guerra de Marib, en muchos aspectos, decidirá el destino de Yemen en los próximos años.