Decenas de miles de personas abarrotaron el domingo el Zócalo de la capital de México para celebrar con la presidenta, Claudia Sheinbaum, la decisión de Estados Unidos de posponer los aranceles a muchos de los productos del país. La multitud se aferró a grandes banderas mexicanas y gritó “¡México está para ser respetado!” mientras vitoreaba a Sheinbaum. “Afortunadamente, el diálogo y el respeto han prevalecido”, dijo la presidenta a la multitud.
La celebración se produce pocos días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pospusiera un mes los aranceles del 25% sobre muchas importaciones procedentes de México, diciendo que Sheinbaum había hecho progresos respecto al tráfico de drogas y la inmigración irregular. Sheinbaum había planeado anunciar medidas de represalia el domingo, pero en su lugar realizó una celebración masiva. Aunque en el horizonte persisten las amenazas, la mandataria se mostró optimista de que no se apliquen aranceles a México y señaló que seguirá actuando con “cabeza fría” frente a Trump.
Entre los simpatizantes de Sheinbaum se encontraba Roberto González, un informático de 68 años. “La unidad del país es muy importante”, dijo González, quien agregó que solo así México podrá “enfrentar a una de las potencias más grandes del mundo”. También animó a la presidenta Mariana Rivera, una activista social de 40 años que sostenía una enorme bandera mexicana tan alta como le permitían sus brazos. A pesar de las amenazas a las que se enfrenta el país, la activista se mostró convencida de que “la presidenta lo va a superar todo”.
Cautela entre los analistas y preocupación ante la incertidumbre
Los analistas afirman que no esperan que la jubilosa ceremonia alivie el clima de incertidumbre que amenaza las nuevas inversiones y la economía mexicana. No obstante, señalan que ayudará a Sheinbaum a consolidar apoyos internos frente a Trump, que está marcando el ritmo de las relaciones bilaterales.
“Es un evento pensado más para la política interna“, dijo el politólogo Javier Rosiles Salas, al afirmar que Sheinbaum buscará aprovechar el evento del domingo para fortalecer su imagen. Rosiles Salas dijo a AP que pese a la preocupación en México por los impactos económicos de una guerra arancelaria con Estados Unidos, la confrontación con Trump ha sido “muy rentable para Claudia Sheinbaum” y le ha permitido alcanzar un apoyo popular superior al 60% tras cinco meses de su mandato.
EE.UU. es el principal socio comercial de México y destino de más del 80% de las exportaciones mexicanas. Aunque la presidenta, de 62 años, parece fuerte ahora, no está claro si su apoyo político se debilitaría si la economía mexicana se deteriora a causa de las tensiones con Estados Unidos.
México podría enfrentar una contracción del PIB superior al 1%
Por ahora, las proyecciones de los especialistas y las agencias de calificación no son favorables. La mayoría de los analistas coinciden en que si se imponen aranceles generales, México podría enfrentar una contracción del PIB superior al 1%. Un clima prolongado de incertidumbre no favorece a México, según Samuel Ortiz Velásquez, profesor de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Tras conversaciones telefónicas con sus homólogos de México y Canadá, Trump decidió el pasado jueves pausar hasta el 2 de abril los aranceles generales para los productos que están bajo un acuerdo comercial trilateral, el llamado T-MEC o Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá.
A principios de febrero, Trump también suspendió los aranceles después de que Sheinbaum prometiera enviar 10.000 guardias nacionales a la frontera norte para contener el narcotráfico. A pesar de los acuerdos, la decisión de Trump sobre los aranceles del 25% al acero y aluminio de México y Canadá, cuya entrada en vigor está prevista para el 12 de marzo, sigue en el aire.
