Este viernes fue desactivada una bomba encontrada en una de las casas de proyectos productivos de excombatientes de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), firmantes del Acuerdo de Paz de 2016.

En el lugar, denominado Casa Alternativa y ubicado ubicado en la calle 36 con carrera 17, funciona el bar-restaurante de un excombatiente reinsertado tras el acuerdo y es sede de reuniones de integrantes de la coalición de izquierda Pacto Histórico y del partido Comunes, nombre que ahora recibe el movimiento político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, que conforman exguerrilleros.

El secretario de Seguridad, Convivencia y Justicia de Bogotá, Aníbal Fernández de Soto, informó que en horas de la mañana el dueño del establecimiento encontró en el baño de mujeres “una bolsa que contenía una botella plástica, con un líquido y cables adaptados a un teléfono celular” y, tras sacar el dispositivo del local, dio aviso a las autoridades.

De acuerdo con el funcionario, una unidad antiexplosivos realizó la verificación y encontró que la botella contenía en su interior aproximadamente un kilo y medio de “anfo” —un explosivo de alta potencia—, dos detonadores y un sistema de detonación por activación de radio frecuencia vía celular. “Los técnicos la desactivaron de manera controlada”, precisó.

El senador de Comunes Julián Gallo Cubillos dijo que, al parecer, este artefacto fue introducido en la tarde del jueves, en momentos en que se desarrollaba una reunión de candidatos al Congreso por el Pacto Histórico.

El legislador añadió que para la tarde de este viernes está programada una reunión con jóvenes. “Esto demuestra que no hay garantías para la oposición en Colombia, que el Gobierno de [Iván] Duque ha sido incapaz de garantizar la seguridad de los colombianos, ya no solamente en los territorios, sino aquí en la propia capital de la República”, dijo Gallo.

Por ello, instó a la Misión de la Organización de las Naciones Unidas a tomar “cartas en el asunto, para que se conozca a nivel internacional y ante el Consejo de Seguridad lo que está sucediendo, en medio de un Gobierno que se negó a implementar de manera integral los Acuerdos de Paz“.

De acuerdo con un informe presentado por el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) en noviembre pasado, con motivo del quinto aniversario del Acuerdo de Paz, desde la firma del documento en 2016 hasta entonces han sido asesinados 299 excombatientes de las FARC, más de 40 de ellos en 2021.

Acto criminal en época electoral

Fernández de Soto informó que la Fiscalía de Colombia, junto con la Alcaldía y la Policía de Bogotá, “adelantan las investigaciones pertinentes para esclarecer la situación”.

Los senadores Wilson Arias e Iván Cepeda, del Polo Democrático Alternativo, movimiento político que forma parte del Pacto Histórico junto a Comunes, condenaron estos hechos.

Arias lo calificó como “un nuevo acto criminal para enrarecer la campaña electoral”, cuando se acercan los comicios legislativos y presidenciales en Colombia.

Por su parte, Guillermo Rivera, exministro del Interior del anterior Gobierno, dijo que “es muy grave esta noticia”.

“No solo están asesinando excombatientes sino que también buscan atentar contra los dirigentes del partido Comunes“, añadió.