El lanzamiento de un mortero por el Ejército de China contra objetivos simulados durante un ejercicio militar, 23 de agosto de 2018.
Un documento atribuido a un analista de la Inteligencia rusa revela que el presidente chino, Xi Jinping, planea la captura de Taiwán en próximo otoño.
“Xi Jinping está considerando al menos tentativamente la captura de Taiwán en otoño; necesita su propia pequeña victoria para ser reelegido para un tercer mandato; hay una lucha de poder colosal”, revela un documento que se dice que fue escrito por un analista anónimo del Servicio Federal de Seguridad (FSB, en ruso) de Rusia, que se hace llamar “Viento de cambio”, según recoge la revista estadounidense Newswwek.
La información contradice la facilitada por la Inteligencia de Taiwán sobre el tema. De hecho, en octubre de 2021, el jefe de Inteligencia taiwanesa, Chen Ming-tong, dijo que no era probable un ataque de China en los próximos tres años.
En reacción, Joseph Wu, el ministro de Exteriores de Taiwán, enfatizó el miércoles que su país tendría que prepararse independientemente, sin que le importara si China decide invadir o no la isla. “Debemos estar siempre listos para defendernos”, urgió.
El Ejército de China reitera su soberanía sobre Taiwán en un mensaje en el que advierte de que no tolerará actos separatistas ni injerencia extranjera en la isla.
El informe ha salido a la luz en medio de la escalada de tensión en torno a Ucrania en lo que va del inicio de la operación militar de Rusia en este país. Muchos expertos creen que China observa de cerca la operación rusa en Ucrania para medir la reacción de los países occidentales en caso de una eventual invasión de Taiwán.
No obstante, Pekín ha rechazado cualquier comparación entre crisis en Ucrania y situación de Taiwán. De hecho, la portavoz de la Cancillería china Hua Chunying se dirigió a finales de febrero a los separatistas taiwaneses diciendo que Taiwán “por supuesto no es Ucrania” y siempre ha sido una parte inalienable de China.
China considera a Taiwán parte integrante de su territorio y rechaza todo intento separatista de la isla con la ayuda foránea, especialmente de parte de Estados Unidos. En esta línea, Pekín denuncia los esfuerzos de Washington por fortalecer el apoyo militar a las fuerzas taiwanesas, advirtiendo que tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar su seguridad y su integridad territorial.