Mediante un comunicado emitido el miércoles, el Ministerio de Defensa de Taiwán declaró que los Sistemas de Cohetes de Artillería de Alta Movilidad (HIMARS, por sus siglas en inglés) que compró a Estados Unidos estarán listos para su entrega un año antes de lo programado originalmente.
Conforme a la nota, el Ejército taiwanés recibirá los 29 lanzadores M142 HIMARS a partir de 2026, un año antes de la fecha original de 2027, después de que el país norteamericano acordara priorizar el envío de armamentos bélicos a Taipéi ante cualquier aventurismo militar de China en su contra.
Estados Unidos y la isla firmaron un acuerdo en 2021 para comprar 11 lanzadores HIMARS. En 2022; Taiwán decidió añadir otros 18 lanzadores M142 en su lista de compra después de que su Defensa desechara su plan de comprar 40 obuses autopropulsados M109A6 Paladin, puesto que, Washington dijo que los obuses no se entregarían a tiempo debido a una capacidad de producción insuficiente.
Este contrato militar se implementa mientras que se ha demostrado la incapacidad de estos lanzacohetes de largo alcance en la guerra de Ucrania, donde las Fuerzas Armadas de Rusia pulverizan cada vez más los HIMARS estadounidenses, cuyo mecanismo de funcionamiento es sencillo; se trata de un sistema de lanzamiento múltiple montado sobre un camión militar con un alcance de 300 kilómetros cuando lleva sistemas de misiles tácticos.
Haciendo caso omiso a las advertencias de China sobre el envío de armas a la isla, la Administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el 7 de mayo que planea enviar a Taiwán un paquete de armas valorado en 500 millones de dólares recurriendo a un procedimiento por vía rápida. El Gobierno chino advierte que Taiwán es una línea roja en las relaciones Pekín-Washington que no debe cruzarse, asegurando que el único futuro de la isla pasa por la reunificación y que ninguna fuerza puede impedirle esta meta nacional. Además, ha subrayado en reiteradas ocasiones que cualquier fuerza externa que interfiera en sus asuntos y socave la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán asumirá las consecuencias y pagará por sus actos erróneos.