El buque de guerra USS Zumwalt de la Marina estadounidense realiza un disparo de prueba de un misil.
EE.UU. planea instalar las primeras armas hipersónicas de largo alcance en dos destructores de misiles en medio de una carrera armamentista con Rusia.
La Marina estadounidense colocará los misiles hipersónicos en los buques de guerra USS Zumwalt y USS Michael Monsoor, según comunicó el viernes el Mando de Sistemas Marítimos Navales y detalló que las obras de modernización se llevarán a cabo en el astillero Huntington Ingalls Industries (HII) de Mississippi.
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Aunque el informe no anuncia fecha específica para el inicio de las obras de reparación, el capitán Matthew Schroeder, gerente del programa USS Zumwalt con la Oficina Ejecutiva del Programa, Barcos, dijo en marzo que el programa estaba previsto para iniciar en octubre de 2023.
El informe se da a conocer en medio de la escalada de tensiones entre Estados Unidos y Rusia por el conflicto en Ucrania y mientras Moscú lidera la carrera armamentista ante Washington, desarrollando sus propios misiles de crucero hipersónicos de largo alcance Zircon, considerado como ‘asesino de portaviones’.
El presidente ruso, Vladimir Putin, anuncia el lanzamiento exitoso de una salva de misiles hipersónicos Zircon, arma de nueva generación “invisible”.
Fuentes de Defensa rusas anunciaron en julio, que el país euroasiático pondrá en el funcionamiento los misiles Zircon en la Armada en los próximos cinco meses, lo que sería un duro revés para EE.UU.
El presidente ruso, Vladímir Putin, ha descrito el Zircon como parte de una nueva generación de sistemas armamentísticos que son capaces de viajar a nueve veces la velocidad del sonido.
En el actual contexto de tensiones con los países occidentales, sobre todo con Estados Unidos, Rusia ha multiplicado sus anuncios de desarrollo de nuevas armas presentadas por Putin como “invencibles”, como en el caso del Zircon.
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Ante el aumento de las hostilidades de las potencias occidentales contra Rusia, ésta también ha incrementado un 12 % la capacidad combativa de sus Fuerzas Armadas, lo que garantiza el nivel indicado de capacidad defensiva del país euroasiático.
