Donald Trump se postula como el “pacificador” entre Rusia y Ucrania y su llamada a Vladimir Putin para iniciar las negociaciones de paz ha pillado a Europa con el pie cambiado; en fuera de juego y con poco margen de maniobra después de tres años de ayudas a Kiev. Así, la reacción de la UE ha sido espesa, pero con mensaje: “Esperamos discutir el camino a seguir junto con nuestros aliados estadounidenses. Nuestros objetivos comunes deben ser poner a Ucrania en una posición de fuerza. Ucrania y Europa deben participar en cualquier negociación“, concluyeron el miércoles a última hora los ministros de Exteriores de Francia, Alemania, Italia, Polonia y España, reunidos en París.
“Una paz justa y duradera” es el gran objetivo de Europa, que se ha comprometido a mantener el apoyo a Ucrania pese a que la vía de Trump sea otra. “No se puede decidir nada sobre Ucrania sin Ucrania y no se puede decidir nada sobre la seguridad europea sin Europa porque la agresión rusa a Ucrania afecta claramente a la seguridad europea”, avisó por su parte el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares. En la cabeza de todos está la conversación para los acuerdos de Minsk de 2014, en cuya mesa se sentaron los propios Putin y Zelenski junto a Angela Merkel y François Hollande. En cambio, ahora mismo no parece tangible que Alemania y Francia vayan a tener el mismo papel.
Precisamente Berlín se pregunta, a través de su titular de Exteriores, Annalena Baerbock, si de verdad el Kremlin “está listo” para empezar unas negociaciones. En la UE, de hecho, hay una mezcla de cautela y escepticismo, pues las conversaciones no empezarán en el cortísimo plazo. “No se puede adoptar ninguna decisión sobre Ucrania sin Ucrania. Por eso, los asuntos discutidos en el último mes para llegar a una paz han tenido en cuenta a Ucrania”, esgrimió la dirigente germana, mientras Francia considera que los ucranianos tienen que ser “los dueños” de ese cónclave para poner fin al conflicto.
Todo esto se da en un contexto de giro total en las negociaciones: Trump quiere verse “lo antes posible” con Putin, y parece que lo hará en Arabia Saudi, sin contar con la UE, aunque esto no lo ha dicho explícitamente. El presidente de EEUU habló con su homólogo ruso y también con Zelenski, que ha acogido con cautela los movimientos. “Tuve una conversación larga y detallada con el presidente Trump. Aprecio su interés genuino en las oportunidades que tenemos en común y en cómo podemos lograr juntos una paz verdadera. Discutimos muchos aspectos —diplomáticos, militares y económicos— y el presidente Trump me informó sobre lo que Putin le dijo. Creemos que la fuerza de Estados Unidos, junto con la de Ucrania y todos nuestros socios, es suficiente para impulsar a Rusia hacia la paz”, resumió el presidente ucraniano.