El candidato presidencial de la ultraderecha en Argentina, Javier Milei, advirtió que, en caso de ganar las elecciones, convocará a un plebiscito para que la ciudadanía decida si quiere que siga vigente o no la legalización del aborto que se aprobó en el país hace casi cuatro años.
“Estoy en contra del aborto, porque está en contra del derecho a la vida”, aseguró el candidato al reivindicar posiciones conservadoras que ya había manifestado, pero que ahora tienen mayor peso debido a que ganó las elecciones primarias que se realizaron el pasado domingo.
“Si los argentinos creen en el asesinato de un humano indefenso en el vientre de la madre, ya se verá“, desafió al anunciar que, si la mayoría ciudadana votara en contra de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo mediante una consulta popular, él promovería de inmediato su derogación.
En su ya habitual tono violento, Milei también rechazó que el aborto sea un derecho ganado, como proclaman los movimientos feministas que lucharon durante décadas para que la ley fuera aprobada.
“Son personas con el cerebro lavado en una política asesina. ¿Cómo puede ser un derecho ganado matar un ser humano? Cuando uno construye sobre un principio moral incorrecto, el resultado es inmundo”, acusó.
Las declaraciones provocaron una inmediata reacción en redes sociales.
“Milei propone hacer con tu cuerpo lo que quieras, incluso vender órganos, pero no permite el aborto porque todos pueden decidir qué hacer con su cuerpo menos las mujeres“, escribió una usuaria. “No puedo creer que Milei quiera poner de nuevo en la mesa el tema del aborto con semejante crisis económica y social”, agregó otra.
En tanto, una usuaria más escribió: “Milei viene a privatizar todo, sacar el aborto legal y el Ministerio de la Mujer, ahora van a saber realmente lo que es la derecha”.
Al debate se sumó Patricia Bullrich, la candidata presidencial de la coalición conservadora Juntos por el Cambio, pero solo para diferenciarse de Milei, ya que advirtió que este martes que el tema prioritario es la economía.
“No voy a cometer el error de discutir el aborto en medio de la crisis“, dijo al señalar que, además, la reanudación de este debate, que ya se dio en 2018 y 2020, podría dividir al país.
Más ajuste
Por otra parte, Milei también reveló que, luego de su victoria en las elecciones del domingo, lo buscaron funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Me llamaron del FMI y la contactaron a mi hermana para tener una reunión, estamos viendo cómo encararla”, dijo en referencia a Karina Milei, quien es su hermana y asesora más importante.
La declaración provocó un revuelo ya que el organismo no confirmó oficialmente la supuesta llamada. Además, usuarios de redes sociales consideraron que sería “irresponsable” que los funcionarios del FMI buscaran a un político que todavía no gana las elecciones.
El candidato afirmó que no tiene ninguna crítica a un organismo que tiene mala imagen en Argentina, debido al decisivo papel que desempeñó durante el estallido social de 2001 y por la forma en la que volvió a condicionar la economía, luego de que en 2018 se aprobara un préstamo histórico al Gobierno del expresidente Mauricio Macri.
“El Fondo no es un problema, porqué ¿cuál es la clave de todos los programas del Fondo? Bajar el déficit. ¿Y por qué fracasa siempre? Porque no se cumple. Nosotros tenemos un programa fiscal mucho más agresivo, más duro, estaríamos sobrecumplidos en la meta”, señaló, ya que su plataforma electoral se basa en un drástico ajuste del gasto público que incluye la eliminación de la mitad de los ministerios y la desaparición de los programas sociales.