El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el mandatario de Cataluña, Pere Aragonès, celebraron el pasado martes su primera reunión sobre el conflicto catalán, y pactaron reanudar la mesa de diálogo el próximo septiembre.
En este sentido, a través de una encuesta en línea, realizada esta semana en su página web, la cadena HispanTV preguntó a su audiencia si ¿la reunión entre Sánchez y Aragonés es el principio de normalización de relaciones entre España y Cataluña?
En respuesta, un 84 por ciento de los lectores de HispanTV opina que, de cualquier modo, Cataluña seguirá insistiendo en la independencia.
Por otro lado, el 11,5 por ciento de los encuestados cree que, pese a dicho encuentro, el recelo de Madrid seguirá. Mientras tanto, solo un 4,5 por ciento de los lectores piensa que sí hay voluntad de diálogo entre el Gobierno español y la Generalitat.
Partidarios de la independencia de Cataluña marcharon el domingo por el centro de Barcelona para rechazar la visita del rey Felipe VI de España a esta ciudad.
La cita se produjo justo una semana después de que el Gobierno de Sánchez concediera indultos a los organizadores del referéndum soberanista en 2017 que seguían en la cárcel. Un gesto “a favor del diálogo”, en palabras del Ejecutivo central para “pasar página” y poder sentar las bases de la nueva etapa de diálogo.
En una sesión parlamentaria celebrada el miércoles en Madrid, la capital española, Sánchez avisó que “no habrá referéndum de autodeterminación” para Cataluña, salvo que se reforme la Constitución.
El dirigente español también defendió que su Gobierno va a trabajar para “devolver la normalidad a la vida política en Cataluña”. “La vía judicial no vale por sí sola para garantizar la convivencia” entre los catalanes y el resto de la población española, así como, para resolver los problemas políticos, agregó.